LA FERIA DE... JOSÉ JOAQUÍN GALLARDO
José Joaquín Gallardo: «Persiste en mi memoria mi mujer conmigo, que me acompaña desde que ella tenía 15 años»
El decano de los abogados sevillanos vivirá una celebración distinta por la ausencia de su madre
En su quinto mandato consecutivo como decano de los abogados sevillano, José Joaquín Gallardo, rememora la Feria de Sevilla desde que tiene uso de razón. Siempre en familia, con sus amigos de toda la vida, con su mujer desde que tenía 15 años y ahora con sus nietas, aunque este año falta la matriarca: su madre.
Su primera Feria se pierde en la memoria de su infancia. Eran sus padres y sus hermanos en el recinto del Prado de San Sebastián , en la caseta del Círculo Mercantil y en la Plaza de España. Eran payasos en la caseta y orquesta para el baile de los mayores. Eran fotos en cochecitos y caballitos.Son vagos recuerdos ya desdibujados en su mente.
A los catorce años comenzó a ir con sus amigos de los Maristas que fueron sus «grandes amigos para siempre», entre ellos Joaquín Guzmán que desgraciadamente falleció hace unos años siendo catedrático de Económicas; Fernando Díaz del Olmo , catedrático de Geografía y Ramón Reig , periodista y catedrático de Estructura de la Información. También menta a Manuel Henares Ortega que «cantaba con pellizco gitano y con todo el arte del mundo».
Él era el quinto del grupo y el que peor cantaba. «Íbamos de caseta en caseta de conocidos, cantando sevillanas. Teníamos muy poco dinero pero nos invitaban siempre a todo lo mejor», relata el decano del Colegio de Abogados de Sevilla. Luego, muy pronto apareció en su vida su novia, Reyes Navarro , y ya todas las ferias fueron siempre con ella.
Más tardes con las hijas de ambos — Reyes, María Jesús y Laura — y ahora con las nietas: Ángela, Reyes y María Jesús. Cuando era chico sus padres lo llevaban a los cacharritos «lo imprescindible porque tampoco nosotros éramos mucho de Calle del infierno» pero sí de la algarabía de la Feria pues no en vano «en mi juventud las madrugadas se alargaban hasta el amanecer y volvíamos siempre de día, andando, como íbamos, también, desde San Lorenzo».
José Joaquín Gallardo es feriante de todos los días y a todas las horas a pesar de que nunca ha cantado bien «aunque lo disimulaba magníficamente gracias al grupo de mis amigos, que entonces ya eran todos ellos catedráticos en sevillanas». Tampoco baila bien «pero de vez en cuando me arranco con alguna mujer guapa, que en la Feria lo son todas». Comía de todo y bebía de todo hasta que desde hace muchos años el punto de su Feria lo pone la cerveza sin alcohol y lo pasa divinamente.
Echa de menos «mi juventud, que se esfumó hace ya muchos años y a mi madre por lo que mi Feria este año será muy distinta ya que estaré en algunos compromisos institucionales, llevaré a mis nietas a los cacharritos y poco más». Y en su memoria persiste «mi mujer conmigo, que me ha acompañado desde que ella tenía 15 años».