Intervienen chocos y boquerones caducados antes de que llegaran a las cocinas de las casetas

La seguridad y el buen desarrollo de un evento multitudinario como la Feria de Abril depende de numerosos detalles, incluido el control de los alimentos que se van a servir en las casetas. Mariscos, pescados o carnes en mal estado pueden provocar un problema de salud pública mayúsculo . Para evitar esas situaciones la Policía Local y el Seprona de la Guardia Civil realizan inspecciones sorpresa a los transportes de alimentos que llegan al recinto ferial cada día para suministrar género a las casetas.

En una de estas inspecciones realizadas este lunes en los accesos al Real, los agentes han requisado 190 kilos de alimentos perecederos que incumplían los requisitos sanitarios y de salubridad para el consumo humano. En concreto se trataba de 150 kilos de chocos y 15 kilos de boquerones caducados; así como 14 kilos de boquerones y 12 kilos de solomillo sin etiquetar convenientemente.

La mercancía fue intervenida al transportista y tirada a un contenedor. «Es una labor muy importante la que realiza este dispositivo conjunto ya que se evita la comercialización y el consumo de alimentos en mal estado que puede acarrear enfermedades » afirma Juan Carlos Cabrera , delegado de Seguridad del Ayuntamiento de Sevilla.