el porvenir
Y Manuel murió entre cartones en Nochebuena en las calles de Sevilla
Conocido por los vecinos del barrio, era atendido por el proyecto Lázaro de Cáritas de la parroquia de San Sebastián
Llevaba años Manuel malviviendo en las calles del Porvenir, víctima de la sociedad y de sí mismo, entre toques de metadona y cartones para refugiarse de los ataques del «mono» y del frío en una estampa terrible en la que sólo entraba el lenitivo del proyecto Lázaro de la Cáritas Parroquial de San Sebastián y la mano de algunos vecinos que no apartan su vista de la desgracia de sus semejantes y que han sentido la muerte de Manuel.
Entrando las horas vespertinas de la Nochebuena murió, solo, como había vivido los últimos años de su poco más de medio siglo de vida. Lo hallaron los voluntarios de ese proyecto con nombre de resucitado que cada noche recorren las rutas de los sin hogar del barrio.
Nada mejor para reflejar la crudeza de este suceso, aparentemente menor, que la carta remitida a Cáritas por Jorge Mula, trabajador social del proyecto: «Durante nuestra ruta de encuentro del pasado 24 de diciembre, aproximadamente a las 8 de la noche, encontramos muerto a nuestro hermano Manuel, frío, refugiado entre cartones, liado en una manta. Avisamos a los servicios de emergencia permaneciendo junto a él hasta que la autoridad judicial decretó el levantamiento del cadáver», al que el párroco, Isacio Siguero acudió a dar la última bendición.
Llevaba Manuel, que en sus buenos tiempos fue camarero de una venta, muerto varias horas, «encogido y oculto en su refugio de cartones», junto a un portal de viviendas de una calle residencial del Porvenir. Jorge Mula ha escrito: «Manuel ha muerto rodeado de personas, pero víctima del abandono de sus semejantes, víctima de la exclusión de los más débiles, víctima de un pecado social y colectivo».