Cuando adelgazar se convierte en una enfermedad
El Virgen del Rocío detecta casos de anorexia y bulimia en niñas cada vez más pequeñas, de 11, 12 y 13 años
Los trastornos de la conducta alimentaria, desde la anorexia a la bulimia , no son algo nuevo. Desde que empezaron a aumentar en la década de los ochenta, cuando eran una enfermedad sobre todo de clase alta, a hoy día, que se han convertido en una patología generalizada , la evolución de la enfermedad se ha mantenido.
Según Antonio Vázquez, coordinador de la unidad de salud mental comunitaria del hospital Virgen del Rocío, en este centro, que atiende a una población de 750.000 habitantes, tratan anualmente unos 240 casos. De ellos suelen ser 105 o 110 casos nuevos y el resto son pacientes que ya estaban en tratamiento desde el año anterior.
Una enfermedad femenina
Pero lo que más llama la atención es el hecho de que, aunque las cifras permanecen más o menos estables año tras año, hay un dato novedoso. Según Vázquez, están apareciendo casos en edades cada vez más tempranas . «Hay niñas de 11, 12 y 13 años, algo que antes era muy raro», asegura Vázquez que también revela otro dato preocupante. El hecho de que también se estén produciendo otros casos de este tipo de trastornos en mujeres de entre 40 y 50 años. En algunos casos se trata de señoras que tuvieron trastornos de jóvenes y que ahora han vuelto a caer en esta enfermedad, mayoritariamente femenina.
De hecho, la anorexia y la bulimia son enfermedades que se dan sobre todo en las chicas . Así, de cada quince casos, sólo uno o dos son niños, aunque el coordinador de la unidad de salud mental comunitaria admite que en los últimos tiempos están aumentando los casos entre ellos. Pero aún a mucha distancia.
Pero, ¿qué es la anorexia y la bulimia? Antonio Vázquez asegura que existen dificultades para diferenciar ambas patologías ya que un cincuenta por ciento de las afectadas pasan de un diagnóstico a otro. Lo más frecuente es que el trastorno de la conducta alimentaria comience con la anorexia y luego se convierta en bulimia . Se trata de dos etapas del mismo problema.
Normalmente la anorexia se produce en chicas que al llegar a la adolescencia y con los cambios corporales y el desarrollo (aumentan las curvas), degeneran en una situación de inseguridad. Influenciadas por los cánones de belleza que impone la publicidad con chicas extremadamente delgadas, ellas se sienten gordas y comienzan a restringir la comida. Cada vez ingieren menos alimentos hasta que pierden el control. Es la primera fase: la anorexia. Después de un cierto tiempo de dejar de comer, pueden llegar a perder el control y a comer de forma compulsiva. Entonces se dan «atracones» que luego compensan provocándose vómitos. Ahí llega la bulimia.
En algunos casos ambas conductas se mezclan y se producen trastornos de la conducta alimentaria no específicas. Las hay que se mantienen en la anorexia, sin comer y haciendo mucho ejercicio físico por el miedo a engordar. Y las que pasan a la bulimia. O las que mantienen ambos. E incluso pierden el control ya que por mucho que disminuyan el peso, se siguen viendo gordas y quieren seguir perdiendo.
¿A qué se deben estos trastornos? Normalmente se producen en chicas con un perfil perfeccionista y de autoexigencia muy elevado. En ello también influye la tendencia a «sexualizar» a las niñas a edades cada vez más tempranas. Vestirlas de mujeres, pintarlas y peinarlas como si fueran mayores son factores que influyen. Y pueden ser la causa de una enfermedad que, según el SAS, se trata desde la Atención Primaria a las Unidades de Salud Mental y de Endocrinología. Pero también en muchos centros privados.