apagón del dividendo digital
Miles de sevillanos no podrán ver cuatro canales de televisión a partir de enero
Empresarios, consumidores y administradores de fincas piden una prórroga de tres meses para resintonizarlos
A partir del próximo 1 de enero cerca de 18.000 edificios de Sevilla no podrán ver los canales Boing, Gol TV, Energy y Canal Sur TV ya que no les da tiempo a los instaladores de adecuar las antenas de televisión para adaptarse al denominado «apagón» del dividendo digital.
Por eso el Colegio de Administradores de Fincas de Sevilla, la Asociación Andaluza de Empresas Integradoras de Telecomunicaciones y Servicios Ticc (Faitel Andalucía) y las organizaciones de Consumidores Al-Andalus y UCA/UCE exigieron ayer al Gobierno una ampliación de «al menos» tres meses del plazo previsto para el «apagón» ya que es el tiempo que se necesita, hasta el 31 de marzo, para adecuar las instalaciones de las comunidades de vecinos que quedan por adaptar y que en Sevilla suman 17.756 de un total de 27.318 que precisan esa reforma.
Eso, como mínimo, pues son datos relativos a las comunidades gestionadas por administradores de fincas, una figura que no es preceptiva para la gestión de los inmuebles por lo que Rafael del Olmo, presidente de dicho ente colegial calcula que serán más los bloques y viviendas, en torno, dice a un 65% del parque que hay en Sevilla y su provincia; y, en todo el ámbito andaluz, precisa que afecta a 800.000 personas.
A pesar de que España es un país puntero en la producción de centrales programables y módulos, «a los fabricantes no les da tiempo de generar tal cantidad de recursos desde que salió el decreto el pasado mes de septiembre que obliga a la adaptación»
Del Olmo dice que es imposible técnicamente adaptarse y duda duda mucho de que el Gobierno vaya a dar marcha atrás ya que la semana pasada estuvo reunido con el secretario de Estado de Telecomunicaciones y para la Sociedad de la Información, Víctor Calvo Sotelo, y la repuesta fue taxativa: «No vamos a ampliar el plazo».
«Y no lo van a ampliar —sigue Rafael del Olmo— porque si lo hacen la Unión Europea sanciona al Estado español y éste además, tendrá que indeminizar a las empresas de telefonía».
Aún así, insiste, en la moratoria por las repercusiones económicas que tendrá en esas cadenas la falta de resintonización de canales para los publicistas y empleados y no pasa por alto «el vacío que en muchos andaluces creará no ver la televisión autonómica». Agrega que en este caso la situación en Andalucía se agrava por afectar a una televisión pública.
Pero no solo los administradores de fincas están indignados, los consumidores también denunciaron ayer sus temores y así el presidente de la Unión de Consumidores de Andalucía-UCA/UCE, Juan Moreno, dijo que la concentración en tan pocos meses de la demanda de revisión e intervención en las instalaciones ha podido provocar un incremento en el precio de estos servicios y, posiblemente, de los materiales necesarios para acometerlas.
Pilar Lora, portavoz de la asociación Al-Andalus denunció la falta de información que sufre la ciudadanía sobre los trámites a seguir en todo el proceso; la precipitación en el tiempo para la adaptación; o todo el problema en torno a la ayuda para costear las actuaciones de adaptación en los edificios, «la cual sólo se podrá solicitar una vez que el usuario haya llevado a cabo dichas actuaciones, cuando lo oportuno sería que el acceso a la misma fuese previo a su realización».
El director de la Asociación Andaluza de Empresas Integradoras de Telecomunicaciones y Servicios TICC (Tecnologías de la Información, Comunicación y Conocimiento), José Manuel Muñiz, recalcó que ha solicitado al ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, la creación «urgente» de una comisión específica para abordar la situación actual que está generando en toda España el calendario establecido por el Gobierno de la nación. Constata que el mercado se está quedando sin cabeceras tipo «monocanales» y avisó: «Ante la falta de este material específico, el Gobierno está autorizando bajo las ayudas al Dividendo Digital la instalación de cabeceras programables, justo aquellas que están dando problemas de convivencia entre las señales de televisión y 4G, pero lo que no saben los vecinos de las comunidades de propietarios es que por obtener la subvención, luego van a tener que volver a llamar al instalador para que corrija ese conflicto entre ambas señales».
Noticias relacionadas