El Salón del Manga devolverá el dinero de sus entradas a unas mil personas

Los organizadores de la tercera edición del Salón del Manga de Sevilla (Manga Fest), que se clausuró el pasado domingo en el Palacio de Congresos y Exposiciones de Sevilla (Fibes), han negado a ABC haber vendido más entradas de las permitidas por el aforo de Fibes, aunque admiten que analizarán todo lo ocurrido el sábado, cuando la Policía tuvo que intervenir en las afueras de Fibes para desalojar a unos tres mil jóvenes que pretendían entrar en el recinto, sin que se produjera ningún herido.

La Policía ha decidido abrir una investigación sobre el incidente y la organización de consumidores Facua ha anunciado una denuncia contra la organizadora. El director del popular festival de videojuegos, Jesús Benito Bermejo, dijo a ABC que se devolverá el dinero de unas mil entradas, quinientas correspondientes a personas que no pudieron acceder a Fibes el sábado con motivo del colapso formado a la entrada por unos tres mil jóvenes que querían entrar; y otras quinientas, según cálculos provisionales de la organizadora, de las personas que lograron acceder al recinto por la mañana, pero que salieron fuera a comer y ya no pudieron volver a entrar, pese a que la entrada era válida para todo el día. Los que compraron las entradas por Internet deberán solicitarlo por esa misma vía.

Bermejo insiste en que «en ningún momento llegó a completarse el sábado el aforo de cuatro mil personas del Pabellón 2 de Fibes, donde se centraban las principales actividades del Salón. «Si hubiéramos vendido una sola entrada de más, nos habrían clausurado el Salón y eso no ha sucedido», afirma.

El director del Manga Fest explica que «nosotros determinamos un plan de aforo para que una persona pudiera disfrutar de la exposición sin agobios. El problema no estuvo dentro sino fuera porque hubo casi tres mil personas que se quedaron fuera y que no pudieron comprar la entrada —comenta Bermejo—.

Muchas de ellas hicieron colas de hasta dos horas para comprarlas y al final vieron que se cerraba la taquilla porque se agotó el aforo y entonces agolparon en torno al recinto, bloqueando incluso las salidas de emergencia, lo que obligó al desalojo y a la intervención policial», según Bermejo.

La organización de Manga Fest asegura que el domingo, último día del festival, dejó pasar gratis a todas estas personas que presentaron su entrada del sábado, «tanto los que la utilizaron por la mañana como los que no la pudieron utilizar porque intentaron entrar hacia el mediodía, cuando se inició el colapso».