La provincia de Cádiz, pionera en la cardiología preventiva

Este pasado fin de semana se han celebrado en Chiclana las Jornadas Andaluzas Multidisciplinares de Cardiología Preventiva. Miriam Martín Toro es cardióloga en el Hospital Universitario de Puerto Real y ha sido la organizadora de este encuentro en el que especialistas llegados desde toda Andalucía se han reunido para hablar sobre la prevención de episodios cardiovasculares.

La cardiología preventiva tiene como objetivo ir un paso más allá de la rehabilitación cardíaca. Tal y como cuenta la doctora Martín «hacemos algo más que que rehabilitar. Realmente es un abordaje global». En este nuevo modelo, se hace un seguimiento de los pacientes tras un ingreso por un episodio como, por ejemplo, un infarto agudo de miocardio. Para esos pacientes a veces se hacía difícil acudir a la consulta de rehabilitación cardíaca por distintos motivos como, por ejemplo, la dispersión geográfica, un problema que desde el hospital de Puerto Real conocen bien dada su amplia área de cobertura. «En esos pacientes que sabíamos que teníamos un déficit de seguimiento porque quedaban perdidos en el limbo, lo que hacemos es que en el alta le mandamos una analítica de control que se hacen ellos en su centro de salud a las cuatro o a las seis semanas. Además les damos un teléfono de contacto de un enfermero que se encarga posteriormente de de ver esa analítica». Y el papel de enfermería en este punto es clave: «el enfermero revisa la analítica y con nuestra aprobación hace el ajuste terapéutico que necesita». En caso de aparecer alguna complicación tras el alta, el contacto directo permite que el paciente entre en un circuito rápido de atención temprana. «Estamos plantándonos incluso ahorrar la visita presencial después del alta en estos en estos pacientes», asegura la doctora.

Todo este protocolo está dentro del proyecto Florence, un proyecto piloto que comenzó en el Hospital Puerta del Mar, que continuó en Puerto Real y que ahora se va a desarrollar en el resto de Andalucía. Uno de los muchos beneficios es una mayor adherencia de los pacientes al tratamiento: «reforzamos la importancia del por qué deben tomar tratamiento y, además, si detectamos que aparece algún efecto secundario de manera precoz, podemos utilizar alternativas terapéuticas o o adaptar el tratamiento a la forma adecuada», explica la cardióloga que añade que también «mejora el estado de satisfacción del paciente porque hay un seguimiento clínico y no se sienten abandonados».

En general, los resultados de este proyecto Florence son muy positivos, «tanto para el paciente como para el resto de mis compañeros clínicos». Con una mayor facilidad para el seguimiento de los pacientes «mejoramos resultados terapéuticos y mejoramos pronósticos que al final es lo que buscamos», explica la doctora Martín.

Lo que surgió como un proyecto piloto, ya se ha instaurado como parte del seguimiento habitual del paciente y en el que la pieza fundamental es enfermería. «Los médicos a veces no no tenemos tiempo para todo y esto ha salido adelante porque enfermería quiero colaborar también». Una figura que, además, normalmente se siente más cercana a los pacientes que la de los doctores y que facilita los buenos resultados.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, las enfermedades cardiovasculares han sido la primera causa de muerte en los últimos diez años. En los datos provisionales del año 2023, los tumores se situaron como primera causa de muerte en el año 2023, con un 26,6% del total de las defunciones. Las muertes por enfermedades del sistema circulatorio descendieron un 5,3% respecto a 2022, situándose como segunda causa más frecuente, con un 26,5% del total. La doctora Martín explica que «no es porque el cáncer aumente, sino porque cae la enfermedad cardiovascular» lo que quiere decir que «hemos hecho algo o estamos haciendo algo bien en cuanto a a a prevención de mortalidad cardiovascular»

Una reducción que viene por una suma de factores según la opinión de la cardióloga: «aparte de evidentemente las mejoras terapéuticas en cuanto a atención temprana, las medidas de prevención secundaria con las unidades de cardiología preventiva o rehabilitación cardíaca, también la la educación del paciente es fundamental»