Cáncer de ovario: cuando el diagnóstico tardío reduce la esperanza de vida
Cada día, 10 españolas son diagnosticadas de cáncer de ovario, el quinto tumor más mortal entre las mujeres y, sin embargo, uno de los más desconocidos.
Como sus síntomas se confunden con los de enfermedades más leves, la mayoría de las veces se detecta tarde, cuando está en fases avanzadas y el pronóstico es peor
Por eso ha que reivindicar la importancia de las revisiones ginecológicas anuales, que incluyan la ecografía vaginal o ginecológica. Porque aunque es el 5º cáncer en frecuencia , la tasa de mortalidad debida al diagnóstico tardío es muy alta
Sabemos que el cáncer de ovarios es el 5º cáncer en frecuencia en mujeres. Afecta a una de cada 70-80 mujeres . Esto supone el 1,4% de canceres en la población general. De ellos, el 85-95% son espontáneos y el 5-15% son heredados. En este pequeño porcentaje, la herencia es autosómica dominante. Esto significa que el 50% de la descendencia estará afectada de la mutación predisponente. Los 2 genes que principalmente intervienen en estas mutaciones son BRCA 1 Y 2 , que fueron descubiertos en 1994 y 1995 por Mary Claire King en EE.UU.
Pero la mayoría de los casos son espontáneos y eso significa que no tenemos ninguna pista para sospechar quién puede llegar a tener un cáncer de ovarios.
Existe una amplia variedad de estirpes de carcinomas de ovarios, dependiendo de las células ováricas de las cuales deriven, y en función de ello se clasifican en diferentes tipos. Y cada tipo de cáncer tiene una edad más frecuente de aparición y unos índices de gravedad y de progresión diferentes .
La principal característica común en general es la ausencia de síntomas . Esa es la causa de que la mayoría de las veces , el diagnostico sea tardío y el pronóstico de vida empeore.
Por ello, es imprescindible hacer revisiones ginecológicas , que incluyan citología con detección de HPV para prevenir el cáncer de cuello de útero, ecografía transvaginal, donde podemos evaluar tanto el útero como los ovarios, y revisión clínica y radiológica de las mamas.
La mayoría de los casos son espontáneos y eso significa que no tenemos ninguna pista para sospechar quién puede llegar a tener un cáncer de ovarios
Generalmente el primer diagnóstico es en ecografías hechas de rutina. También a veces, la paciente puede acudir consultando síntomas de dolor abdominal, sensación de distensión, o dificultades para la micción y la defecación. Cuando esto ocurre, estamos ante tumores de gran tamaño, y a veces ya extendidos a otros órganos de la cavidad abdominal
La primera prueba diagnóstica seria la ecografía , que si además la hacemos con doppler color, nos permitirá orientarnos hacia la benignidad o la malignidad de la lesión. A continuación, pediríamos una resonancia magnética con contraste para saber más de la naturaleza benigna o maligna del tumor y decidir si le tenemos que dar un enfoque quirúrgico en el caso de que sospechemos malignidad.
Es imprescindible hacer revisiones ginecológicas , que incluyan citología con detección de HPV para prevenir el cáncer de cuello de útero, ecografía transvaginal
El primer paso sería la extirpación quirúrgica, ya que en el cáncer de ovario es muy importante extirpar la lesión en su totalidad. Y después, en función del tipo de tumor, se elige el tratamiento complementario con quimioterapia.
El principal problema es que es un cáncer muy silencioso, que apenas da síntomas hasta que está en un estado muy avanzado. La única herramienta que tenemos en la consulta para sospecharlo e intentar hacer un diagnóstico temprano es la ecografía, que si está incorporada a la sistemática de las revisiones anuales, permitirá estudiar cualquier masa o tumoración que aparezca en el ovario, aunque no haya dado ningún síntoma.
Por tanto, en este Día Mundial del Cáncer de Ovario , reivindicar la importancia de las revisiones ginecológicas anuales, que incluyan la ecografía vaginal o ginecológica. Porque aunque es el 5º cáncer en frecuencia , la tasa de mortalidad debida al diagnóstico tardío es muy alta.
Dra. Carmen Pingarrón Santofimia. Jefa de Equipo de Ginecología y Oncoginecología del Hospital Quirónsalud San José.