ENTREVISTA
José Fiscal: «Los rocieros saben que cruzar Doñana es un privilegio, y corresponden»
El consejero de Medio Ambiente está en contra de los peajes, pero comprende que un Ayuntamiento exija que el paso de una hermandad por su término no le perjudique
Se define como rociero de a pie. José Fiscal , consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio (Huelva, 1968), no oculta esa condición; al contrario, presume de ella, y hace en esta entrevista una defensa a ultranza de los peregrinos que cada año cumplen con la tradición en la Romería más populosa de Andalucía. Una Romería que tiene entre sus principales marcos uno de los espacios más singulares de la Comunidad autónoma, el Parque Nacional de Doñana y su entorno.
—¿Los rocieros son conscientes de que cruzar Doñana es un privilegio?
—Yo estoy convencido de que los rocieros saben que es un privilegio cruzar el Parque. Son conscientes, en su inmensa mayoría de la importancia medioambiental que tiene Doñana. Es un derecho de las hermandades. Algunas llevan haciéndolo desde hace siglos. y por tanto así debe seguir siendo. Es un privilegio porque no hay demasiadas ocasiones, no ya en Doñana sino en cualquier espacio natural de España, de atravesarlo como se hace aquí, con tracción animal y en un sitio virgen. Y en términos generales los rocieros corresponden a ese privilegio. Tengo cierta experiencia como rociero y como exdelegado del Gobierno de la Junta en Huelva y responsable en la provincia del Plan Romero. Estoy absolutamente convencido de lo que estoy diciendo y repito que los rocieros tienen bastante conciencia de que deben preservar los sitios por donde pasan. Puede que haya determinados episodios condenables que hay que corregir. Pero también es verdad que en mi experiencia esto ha cambiado a mejor muy notablemente en los últimos años.
—¿Cuáles son las recomendaciones de la Consejería al mundo rociero?
—Está prohibido hacer fuego, el lanzamiento de cohetes, la basura se tiene que depositar en los sitios habilitados para ello, en las cubas que hay en todos los lugares de sesteo o de pernocta, una responsabilidad que corresponde a las diputaciones, y hay que cumplir los horarios por razones de seguridad y no solo ambientales. Eso en general. Y de forma específica ha habido años en los que determinadas hermandades han tenido que modificar levemente su trayecto porque, por ejemplo, estaba criando una hembra de lince, o porque en un nido de águila imperial también estaban criando.
Eso se les dice a las hermandades y la verdad es que atienden las indicaciones de buen grado y con mucha naturalidad. Como rociero que soy, digo que lo primero que le da sentido a todo esto es la Virgen. No lo oculto, como todo el mundo sabe. Pero un elemento esencial es el medio ambiente. El Rocío no se entiende sin pinos, sin arena, sin dunas... No se entiende en un medio urbano. Por tanto, estoy convencido de que los peregrinos son los principales interesados en proteger el medio natural, aunque suene a tópico.
¿ Hay una comunicación fluida con las hermandades desde la Consejería?
Básicamente la Consejería canaliza la relación con las hermandades a través del Plan Romero, del que formamos parte, y que coordina y dirige la Consejería de Justicia e Interior. Todos los años hay un momento en que una hermandad se dirige a nuestra Consejería para plantear alguna cuestión concreta. Yo personalmente tuve este año una reunión con el hermano mayor de la Hermandad del Rocío de Triana, con motivo de la peregrinación sin tracción mecánica. Y la coordinamos junto con la Dirección del Parque.
—¿Existen medidas excepcionales para evitar incendios forestales en el interior del Parque?
Efectivamente. Hay que destacar que otro campo de actuación de la Consejería es el Plan Infoca contra los incendios forestales. Como siempre, participamos en la Romería con un operativo específico tanto en los caminos de ida y de vuelta como en los días en los que las hermandades están en la propia aldea del Rocío. Son unas doscientas personas las que están adscritas al Plan Romero. Y en este periodo están en alerta especial las doce torres de vigilancia dispersas por el área de influencia de la Romería.
—¿Están justificados los peajes rocieros que tratan de imponer los ayuntamientos?
Es un tema complicado y espinoso. Creo que los ayuntamientos tienen derecho a pedir que el paso de las hermandades por sus términos municipales no les suponga un perjuicio. Y pienso que en el marco del Plan Romero esa cuestión está razonablemente resuelta. La Junta de Andalucía y las diputaciones, que en este asunto son esenciales, se ocupan de gestionar la limpieza al paso de las hermandades. Por tanto, yo creo que los peajes no son necesarios. Y lo que sí haría es un llamamiento para que el paso de una hermandad por un término solo tendrían que reportar beneficios.
¿Andalucía podría tener ya el tercer Parque Nacional, el de la Sierra de las Nieves, en Málaga, si el Gobierno no hubiera estado en funciones en los últimos meses?
Al menos se podría haber producido un avance. Nosotros enviamos al Ministerio la solicitud formal y no nos ha contestado. Cuando suceda aún quedará una tramitación importante y finalmente la aprobación en Andalucía para de nuevo remitirla a Madrid y que el Consejo de Ministros sea el que apruebe la declaración de Parque Nacional. Es una declaración que nos han solicitado los alcaldes de los municipios de la zona. Quieren que el Parque Natural actual sea Parque Nacional. Eso es algo muy a tener en cuenta. Estoy convencido de que si los territorios no quieren a sus espacios naturales, nos lo ponen muy difícil.