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Dinamarca, una ruta de invierno para un país de cuento
Viajar a Dinamarca en invierno puede resultar temerario visto desde España, pero lo cierto es que tiene increíbles paisajes nevados
Viajar a Dinamarca en invierno puede resultar temerario visto desde España , pero lo cierto es que los increíbles paisajes nevados que ofrece y el excelente estado de sus carreteras e infraestructuras para hacer frente a las inclemencias meteorológicas convierten esta escapada en una experiencia muy cómoda y, seguramente, inolvidable.
Cualquier ruta por Dinamarca empieza en Copenhague . En torno a los 40€ por trayecto se pueden encontrar vuelos desde ciudades como Barcelona o Madrid en los meses más fríos del año.
La mejor forma de recorrer los lugares más atractivos de Dinamarca es con el alquiler de coche en Copenhague y si el objetivo es disfrutar al máximo del viaje y evitar sorpresas negativas, lo mejor es reservarlo con empresas contrastadas y con una amplia trayectoria como Europcar . Además, con el código promocional Europcar adecuado, el vehículo se quedará en un precio mucho mejor.
Copenhague
La capital es, sin duda, la ciudad más atractiva de Dinamarca y su gran destino turístico . Su belleza, con casas de colores y canales, las posibilidades de ocio y gastronómicas y los monumentos que se pueden visitar la convierten en la primera parada. Y es que Copenhague en diciembre ofrece una estampa muy diferente, con la nieve como protagonista, que permite obtener una imagen única de entornos tan conocidos de la ciudad como Nyhavn , el canal más famoso con sus características casas y una gran oferta de bares y restaurantes.
No es el único lugar al que la nieve le da un aspecto único y romántico. Copenhague y Tivoli son dos términos indisolublemente unidos y este parque de atracciones del siglo XIX es uno de los lugares más recomendables para visitarlo en invierno porque adquiere un ambiente realmente único a pesar de que algunas atracciones no puedan disfrutarse.
No hay que perderse en la capital danesa el barrio de Christaina , una comuna de en la que conviven más de 1 000 personas. Tampoco La Sirenita , el símbolo de Copenhague y una de las imágenes más características de la ciudad antes de empezar a pensar en abandonar la capital para conocer el resto del país.
Castillo de Frederiksborg y Roskilde
Tras alquilar el coche en Europcar, nuestra ruta nos conduce hasta el Castillo de Frederiksborg . Se trata de una imponente fortaleza a apenas algo más de media hora de distancia. Su situación ofrece bellas imágenes en invierno y su interior permite hacer un recorrido por la historia de Dinamarca ya que también acoge el Museo de Historia Nacional .
Este mismo día se puede continuar ruta hacia Roskilde, también a algo más de media hora. Su catedral es Patrimonio de la Humanidad y alberga los restos de más de treinta reyes daneses. No hay que perderse tampoco su excepcional Museo Vikingo con restos de barcos y muestras de cómo era la vida de los Señores del Mar tanto al aire libre como en el museo interior.
Aarhus
Esta ciudad se encuentra a dos horas y media de Roskilde. Aarhus es una ciudad universitaria con mucha vida nocturna y la catedral más grande de Dinamarca con capacidad para 1.200 personas y una torre de 93 metros de altura.
La Ciudad Antigua de Aarhus reúne 75 casas históricas trasladadas allí desde distintos puntos que crean una zona de gran encanto. Funciona como un museo al aire libre con personas ataviadas con trajes de época que, además, actúan como lo harían hace 200 años.
Odense
No se puede viajar a Dinamarca sin visitar la cuna de Hans Christian Andersen . A tan solo una hora y tres cuartos de Aarhus, en Odense, se encuentra la casa natal del escritor convertida ahora en un museo con el que conocer, en profundidad, su vida y su obra.
También resulta interesante la Catedral de San Knud y el parque Andenser Haven, justo detrás de la catedral, en el que se pueden encontrar esculturas inspiradas en la obra del escritor y un ambiente que recuerda, en cierta medida el de sus cuentos.
Odense es la última parada antes de regresar a Copenhague, a apenas dos horas en coche. Es el momento de regresar a España y empezar a pensar en cómo será Dinamarca en verano.