Los «cachetes» de Juncker que se perderán los británicos

Desde que comenzó el proceso que ha culminado este viernes con la victoria de los partidarios de la salida del Reino Unido de la Unión Europea ( Brexit , para los amigos), el presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker , no ha hecho precisamente demasiados amigos entre los británicos. Así lo han demostrado algunas de las «perlitas» que ha soltado a lo largo de las últimas semanas. Algunas tan curiosas como « Los votantes británicos deben saber que no habrá ningún tipo de renegociación » o « Fuera significa fuera » (todas ellas, como cabía esperar, carne de YouTube ).

De hecho, para muchos analistas han sido estos « golpes directos » constantes los que podrían haber azuzado todavía más a los votantes indecisos y haber provocado exactamente la reacción contraria a la buscada por Juncker. Sin embargo ¿Y si hubiera una causa capaz de provocar la movilización de más de un 51% de los ingleses?

Pues bien, los usuarios de YouTube podrían haber encontrado una explicación a todo el jaleo que se ha montado... y este no sería otro que el momento en que -allá por mayo de 2015- el presidente de la Comisión Europea apareció en una cumbre entre la Unión Europea y la Asociación Oriental . ¿La razón? Que, en ese clip (que no tardó en hacerse viral, todo sea dicho) se puede ver al político tambaleándose y bromeando con los asistentes. Numerosos internautas y hasta el mismo diario «The Financial Times», en un artículo escrito en tono jocoso, pusieron la duda en el estado de embriaguez o no del presidente de la CE.

Lo cierto es que el clip no tiene desperdicio y podría haber hecho plantearse a muchos ciudadanos europeos la necesidad de salir corriendo - o nadando- hacia los mismísimos Estados Unidos. Concretamente, en el corto (subido a la red el pasado 28 de mayo) se puede ver como Juncker bromea -como pocas veces antes había hecho- con líderes de la talla del presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk , o la primera ministra de Letonia, Laimdota Straujuma . Todo ello, acompañado de sonrisillas burlonas y algún movimiento brusco de pies.

Pero el clip de YouTube no acaba en ese punto. ¡Solo ha empezado! Y es que, en los segundos siguientes se observa como Juncker se atreve a dar una bofetada cariñosa a algunos de los presentes, bromea con Tsipras sobre su vestimenta y afirma lo siguiente al ver al primer ministro húngaro, Viktor Orbán : «Que ya viene el dictador». De esta retahíla de gracias no se libró ni García-Margallo , quien fue saludado muy marcialmente por Juncker a pesar de no tener pasado militar. ¿Chascarrillos impertinentes? No sabemos, pero es probable que algunos ingleses que ya estuviesen hasta el sombrero Bobby de él tomasen su decisión de decir « goodbye » exactamente en ese momento.