Polémica por una presunta discriminación por talla a una azafata
Una joven ha denunciado haber sido rechazada en su puesto de trabajo por su peso mientras la empresa se defiende: «Ningún miembro de nuestro personal ha sido rechazado en nuestra empresa ni por su talla ni por su peso»
Alba Nevado, una joven contratada para trabajar en Fitur como azafata, ha denunciado a través de un vídeo en su cuenta de Instagram haber sido rechazada por su talla y su peso.
Con un «estoy superindignada porque pensé que nunca me iba a pasar esto, lo juro», Alba comenzaba a relatar, entre lágrimas, que había sido contratada por una agencia de azafatas para trabajar en la Feria Internacional del Turismo (Fitur), que se celebra en Ifema hasta el domingo. Un día antes al evento, durante la formación, se le entregó un uniforme «de talla única», que al probárselo en casa vio que no le quedaba bien. Cuando pidió otro, según relata en el vídeo, lo que recibió por respuesta fue que podrían «darle una talla 42» y que si no le servía «tendría que ir con traje negro».
«Nada más entrar me dicen, '¿tú eres la del problema?'. Como si tener una talla 46 fuese un problema», aseguró Alba. «Yo no quiero que me traten como si fuera un problema y como si mi imagen fuera lo único que sirviera para trabajar, en un puesto que sé que soy lo suficientemente válida como para estar, pero como no encajo dentro del canon de belleza que a día de hoy conocemos, pues no tienen una talla para mí. Por lo tanto, no puedo trabajar», concluyó la joven.
Tras su explicación, Alba Nevado publicó un segundo video en su cuenta para explicar que «Ifema me llamó y me pidió disculpas». También lo hizo la empresa de azafatas que la contrató, y le ofrecieron otro puesto que ha decidido rechazar porque «no se encuentra motivada ni con la suficiente simpatía como para atender a un público que no tiene culpa de nada».
'Best Way', la agencia que la contrató
Según un comunicado de 'Best Way' remitido a ABC, Alba pasó satisfactoriamente el proceso de selección y añaden que ella misma ha señalado en diferentes medios de comunicación que «no considera que haya habido ninguna discriminación» en dicho proceso.
La empresa, habitualmente, días antes del evento pide a sus contratados rellenar una ficha para preparar los uniformes con antelación. En concreto, en la de Alba no constaba su talla . 'Best Way' explica que el día antes al evento se proporcionaron uniformes a más de 100 personas, entre los que se encontraba el de la joven, a la que se «sugiere probarlo antes de volver a casa, pero que señala que no tiene tiempo». Es posteriormente, cuando les comunica que «le quedaba demasiado ajustado».
'Best Way' afirma que trató de buscar otro uniforme y que se le ofreció la posibilidad de traer un traje negro propio . «El día del evento, y tras comprobar que no disponíamos de un uniforme adecuado y que no se podía dar un solución inmediata, se le solicita que vaya a casa mientras se buscaba una nueva solución. En ese periodo, Alba sigue dada de alta en la Seguridad Social . Al cabo de unas horas, idetificamos el vídeo y contactamos de nuevo con ella, nos diculpamos por no haber podido prever la necesidad del uniforme adecuado, se le ofrece de nuevo volver y señala que ya no se siente cómoda –recoge el comunicado–. Ningún miembro de nuestro personal ha sido rechazado en nuestra empresa ni por su talla ni por su peso. Contamos con personal de soporte para el sector de los eventos con todo tipo de tallas : inferiores, iguales y superiores a la de Alba».