El ciclista que salió milagrosamente ileso de un aterrador choque con un tren

Parece mentira que todavía sea necesario repetirlo una y otra vez, pero las señales de tráfico están para cumplirlas . Hacer caso omiso de las indicaciones no sólo pone en serio peligro la vida del infractor, sino también de cualquiera que pueda cruzarse en su camino y se vea envuelto en el accidente provocado. Desgraciadamente, casi a diario vemos comportamientos temerarios en la carretera. Algunos tienen un desenlace fatal; otros, como el que hoy vamos a mostrarte, se resuelven con un tremendo susto que debería servir como lección al incauto de turno.

El escalofriante vídeo que estás a punto de ver fue grabado por cámaras de seguridad en Polonia. Lo hemos conocido a través del blog Inquisitr , aunque en los últimos días se ha hecho viral en YouTube, donde supera ya el millón y medio de reproducciones. Para que no te asustes al ver el terrible accidente, te adelantamos que el ciclista que colisiona contra el tren no sufrió daños de gravedad, tan sólo heridas leves. A la vista de las imágenes, puede considerarse poco menos que un milagro :

Lo que acabas de ver ocurrió en Opole, una localidad situada al sur de Polonia. Es evidente que el ciclista, un hombre de 26 años de edad, decide ignorar el semáforo rojo y la barrera que le instan a detenerse en el cruce con la vía de tren. Pero si prestas atención al vídeo, verás que va prácticamente directo al tren, sin hacer esfuerzo alguno por esquivarlo ni acelerar la marcha para pasar antes de que la máquina llegue. Los internautas especulan con varias posibilidades, como que estuviese escuchando música con unos auriculares o que el tren no hiciese sonar su bocina.

Sea como sea, el hombre de la bicicleta recibe un potentísimo impacto contra un «monstruo» de metal que circula a más de 140 kilómetros por hora. Sale inmediatamente despedido y queda inmóvil en el suelo, haciendo temer el peor de los desenlaces a los conductores que presencian la escena y acuden en su ayuda. El ciclista fue rápidamente trasladado a un hospital y, contra las previsiones más lógicas, apenas sufrió algunos rasguños y fue dado de alta en pocas horas.

Las autoridades polacas realizaron tests de alcoholemia y drogas al imprudente, pero no se encontraron rastros de ninguna sustancia ilícita en su sangre. En cualquier caso, se le impuso una multa de algo más de 120 euros por su comportamiento. Un castigo que sonará prácticamente a regalo para el afortunado ciclista, que jamás olvidará el día en que un tren pudo llevarse su vida por delante. Desobedecer las señales para llegar un par de minutos antes no merece la pena.