La cabeza de un pez «zombi» revive en el plato después de ser cocinada

Imagina que acudes a un restaurante de postín y, cuando vas a meterte entre pecho y espalda un boquerón en vinagre, este empieza a dar saltos en el plato como si estuviese bailando « la Macaranea ». ¿Asombroso verdad?

Pues algo parecido es lo que le ha sucedido a un comensal chino que, cuando iba a hincar el diente al pescado en salsa agridulce que acababa de pedir con no muy buen tino, se percató de que este se movía como si todavía estuviese vivo. Es cierto que el pececillo no se marcó una danza, pero esta resurrección a lo « The Walking Dead » ha granjeado miles de visitas en YouTube a su ator.

Concretamente, el vídeo fue subido a la plataforma de vídeos hace unas pocas jornadas causando al instante gran controversia en la red. ¿Realidad? ¿Ficción? A día de hoy es imposible saberlo, pues se desconoce cuándo fue grabado y no se sabe a ciencia cierta el lugar en el que se produjo esta rara vuelta a la vida. Tan solo se sospecha que pudo sucederse en el distrito de Yuexiu , ubicado en la provincia china de Guangzhou . Al menos, eso afirma afirma la versión digital del diario « Daily Mail ».

Pero volvamos a los hechos de este «milagro de la naturaleza». Tal y como se puede ver en el vídeo (única prueba fehaciente del hecho, todo sea dicho) el suceso acaeció mientras un comensal desconocido pretendía dar buena cuenta de la cabeza de un pez que le acababan de servir con verduras y salsa agridulce . A pesar de la buena pinta que tenía el manjar, la situación se termina recrudeciendo cuando el hombre toca con los pallilos lo que queda del animal. Y es que, en ese momento sus restos comienzan a menearse como si este hubiese vuelto a la vida después de ser pasado por la plancha.

¿Cuál fue la respuesta del comensal? Lejos de desanimarse y llamar al camarero, sacó su móvil y, como una buena persona del siglo XXI, grabó las imágenes. Lo cierto es que no hizo mal, pues de lo contrario pocos le hubiésemos creído. A su vez, y en lugar de apartar el plato, se dedicó a intentar trocear con los palillos la cabeza del pez para empezar a degustarlo. Quizá no todos hubiésemos actuado igual... pero oigan, el hambre es el hambre, que decimos por estos lares.

Fuera como fuese, lo cierto es que este repugnante vídeo ya se ha ganado un hueco entre los preferidos de YouTube y, según parece, seguirá subiendo en visitas en los próximos días. ¿Usted qué opina? ¿Verdad o mentira? Solo le aconsejamos que, la próxima vez que pida pescado, toque primero sus restos para asegurarse de que está muerto.