La duda de Benzema deja espacio al 4-4-2

Benzema es duda. Sufre unas décimas de fiebre por culpa de una gripe. No finalizó el entrenamiento del lunes con el fin de estar bien esta noche. Veremos si comienza en el once que se enfrenta hoy al Schalke. Karim quiere jugar, pero Ancelotti debe valorar si es conveniente forzarle, sin estar recuperado, o si es mejor jugar un 4-4-2 con Illarra y Lucas Silva como escuderos de Kroos , e Isco con mayor libertad de movimientos en ataque. En el Madrid se acabaron las fiestas . Llega la Champions y el club se pone firmes.

El técnico mantenía la incógnita de alinear a Lucas Silva o Illarra en la media y ahora tiene la opción de jugar con ambos y variar de sistema. El italiano sostiene el 4-3-3 siempre que se encuentren aptos Bale, Benzema y Cristiano. Cuando falta uno, prefiere plantear un 4-4-2 con Isco como cuarto mediocampista, más ofensivo, y equilibrar mejor el dentro del campo en el aspecto destructivo. Jesé también espera jugar. Tendrá minutos, seguro.

La titularidad de Pepe en la defensa aporta mayor seguridad después de unas semanas en las que el Madrid acusó la ausencia de los dos puntales, el portugués y Ramos, en el centro de la retaguardia.

Cristiano también quiere dar un paso adelante tras dos meses de transición. Su planificación física coloca el regreso de la Champions como santo y seña. Es la hora. En realidad es la hora para el Real Madrid, que se marca los octavos de final de la Copa de Europa como el segundo arranque decisivo de la temporada.