El grito de Cristiano Ronaldo se vuelve un bumerán en su contra

El ya célebre grito de Cristiano Ronaldo al finalizar su discurso tras ganar el Balón de Oro se ha convertido en un bumerán en contra que amenaza con graparse a sus oídos en territorio enemigo. Ayer, cada vez que el delantero portugués tocaba el balón, los seguidores del Atlético de Madrid lo utilizaron en su contra, un sonido que acabó por desconcertar al CR7, que despachó probablemente su peor partido de la temporada.

Este arma arrojadiza (un «¡Uuuuh, uuuuh!» atronador) ya le acompañó en Getafe y Córdoba. Precisamente ante el conjunto califal Cristiano perdió los papeles y fue expulsado. El grito, que revolucionó en su día las redes sociales, tiene su origen en la concentración de Los Ángeles en julio de 2011: con él la plantilla celebra una buena acción personal en un entrenamiento, un gol en un ejercicio o la victoria en un partidillo.