Sucesos

El niño utrerano accidentado en la Feria de Sevilla recibe el alta

Cayó de una atracción acuática al intentar bajarlo porque tenía miedo y estaba llorando

Alberto Flores

A la familia utrerana Gil, le va resultar muy complicado olvidar la Feria de Abril 2016, ya que su hijo pequeño de solo tres años, sufrió un desgraciado accidente en una atracción de la «calle del infierno», cuando caía de la misma el pasado miércoles 13 de abril. El pequeño sufría contusiones graves en varias zonas de su cabeza, aunque afortunadamente recibía el alta el pasado domingo y ya se está recuperando en su domicilio .

El padre del niño, Antonio Gil, declaraba a los micrófonos de COPE Utrera que «afortunadamente el niño está bien, aunque el susto no los quita nadie, estamos pendientes de unas pruebas en la zona del ojo donde se dio el golpe, ya que próximamente lo va a ver el oftalmólogo del Hospital Infantil». El pequeño presentaba una fuerte contusión en el pómulo derecho, que incluso ha precisado de cirugía estética, ha recibido siete puntos en la zona de una oreja, aunque la peor parte se la ha llevado en la zona posterior de la cabeza, donde ha tenido que recibir casi 40 puntos de sutura .

Todo ha sido culpa de la fatalidad, ya que tras los análisis periciales realizados en la propia atracción, estaba todo en regla y cumplía con las condiciones de seguridad. De esta manera relata el padre del pequeño como ocurrió todo: «el niño se montó en la atracción en la que ya se había montado el pasado año, pero resulta que en esta ocasión le entró miedo y se puso a llorar pidiendo que lo bajáramos. Como conocemos a nuestro hijo, sabíamos que si no lo bajábamos se iba a intentar bajar él solo, por lo que pedimos a los responsables de la atracción que la pararan un momento. Uno de los responsables dijo que no hacía falta, que él iba a intentarlo bajar sin parar la atracción, le quitaron el cinturón y al intentar bajarlo se reliaron las piernas de mi hijo con el propio cinturón y terminó cayendo al cielo con mucha fuerza».

Rápidamente los responsables de la atracción, familiares del pequeño e incluso personas que presenciaron la escena, acudieron al rescate del niño, que fue trasladado de manera inmediata al Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. «Lo más lógico hubiera sido que la atracción hubiera parado para que el niño se hubiera bajado y entonces no habría pasado nada, afortunadamente todo ha quedado en un susto », explica el padre del niño.

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