BAJO GUADALQUIVIR
La mediación alivia el colapso de los juzgados de Utrera y suaviza los divorcios con bienes que repartir
Una mujer de Los Palacios que se acaba de separar cuenta su experiencia a ABC Provincia: «De momento me ahorré los 1.200 euros del abogado», dice
Paqui es una vecina de Los Palacios que convive con José Manuel desde hace diez años, y están casados desde hace siete. Como tantas y tantas parejas han visto cómo la relación se ha ido desgastando hasta el punto de decidir que la ruptura y el tomar caminos diferentes es la única solución.
He aquí el problema. Si una ruptura sentimental en sí misma ya es dolorosa y desagradable , se convierte en un auténtico infierno cuando existen bienes patrimoniales en común. Una medida temporal a la que recurren muchas parejas en esta situación es la de seguir viviendo bajo el mismo techo a la espera de que se zanje legalmente el matrimonio.
Una idea que, lejos de ser un arreglo, supone una agonía insufrible para los todavía cónyuges . Paqui y José Manuel se han visto abocados a ello. « Se pasa realmente mal . Los dos sabemos que la relación está muerta y que no tiene ningún sentido seguir viviendo en la misma casa. Llevamos varios meses así y esto lo único que acarrea es una tensión y un malestar insufrible en lo que se supone que es tu hogar, tu refugio», reconoce resignada.
Rehacer tu vida
Lo único que quieren ambos es algo tan lícito como firmar el divorcio y rehacer cada uno su vida. ¿Por qué no lo han hecho ya? Hace tiempo Paqui fue a consultar con un abogado su situación y le dijo que para empezar a hablar tenía que desembolsar 1.200 euros cada parte, más los gastos que posteriormente se generaran. Además, le advertían de que el pleito era posible que se dilatara en el tiempo varios años. Ninguno pueden afrontar dichos gastos . Así, la cosa estaba enquistada, ya que ninguno de los dos quería abandonar el domicilio conyugal dado que ambos habían participado en la compra del inmueble.
El divorcio había llevado a Paqui a una situación anímica crítica vacía de esperanza. En esas estaba cuando casualmente lee a través de una entrevista en ABC Provincia al juez de paz de Los Palacios que se ha habilitado en el municipio la mediación, un sistema alternativo de gestión y resolución de conflicto donde son las propias partes en litigio las que ayudados por u n tercero imparcial (el mediador) son dueños del posible acuerdo.
No se lo pensó dos veces, y contactó con el Centro de Mediación de Los Palacios, un equipo multidisciplinar de entorno a quince mediadores profesionales formados y habilitados con los requisitos legales. «Desde la primera entrevista hasta ahora (ya lleva varias sesiones) todo ha cambiado. E l trato con los profesionales es muy cercano y nos cargan de optimismo, se involucran en el caso y ahora estamos mucho más predispuestos a poner de nuestra parte.
Los dos estamos completamente seguros de que en breve vamos a llegar a un acuerdo. Lo que antes era inviable económicamente e insufrible por la lentitud del proceso, ahora se ha tornado en algo que presumiblemente arreglaremos pronto y con bajo coste. M e siento como si me hubiese estado ahogando y me hayan tendido una mano» , afirma.
Este centro de mediación, que abrió sus puertas de manera pionera hace un año, da soluciones amistosas a conflictos no solo de pareja, también de acoso escolar, agresiones, maltrato y de muchas otras índoles. Algo que además de abrir una nueva vía de cordialidad , sirve para aliviar los juzgados de Utrera , unos de los más cargados de Andalucía.