MEDIO AMBIENTE
Una «marea verde» protagonizada por los escolares de Utrera
Los alumnos de Utrera, con el impulso del Ayuntamiento, plantan más de 2.000 arbustos en las zonas verdes de la ciudad
La delegación de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Utrera ha puesto en marcha a lo largo de las últimas semanas un interesante programa de participación con los centros escolares de la ciudad para llevar a cabo la plantación de más de 2.000 arbustos en diferentes enclaves de Utrera. Han participado casi 600 escolares procedentes de once colegios de la localidad, que han disfrutado plantando estas plantas que servirán en el futuro para conservar los suelos y aumentar la biodiversidad.
En este caso, los lugares escogidos han sido Vistalegre, Parque V Centenario, Los Molinos, Fontanilla y Pastorcito, donde se han plantado especies autóctonas como por ejemplo r omero, mirto, granados , durillos, palmitos, nandinas y olivillas; que al ser variedades propias de la tierra necesitan menos riego dada su mejor adaptación a la meteorología y al terreno. Plantas que van a llenar de vida suelos en los que no había absolutamente nada.
María José Ruiz es la delegada de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Utrera y en relación a este tema ha explicado que «los matorrales son plantas leñosas de talla media, capaces de crecer en suelos más pobres de los que necesitan los árboles. Normalmente tienen un crecimiento rápido y la función, importantísima, de formar con las raíces una malla subterránea que mejora las características de los suelos, evitando la desertización y creando un ecosistema en equilibrio: el matorral es productor y conservador de suelo y de vida».
Con la puesta en marcha de este tipo de actividades se cumple un doble objetivo, ya que se acerca la naturaleza a los centros educativos y tal y como ha explicado José María Villalobos, alcalde de Utrera, se consigue que los alumnos comprendan «el respeto que le debemos a la naturaleza y para la preservación del medio ambiente». Para el primer edil utrerano estas plantaciones también buscan «fomentar el espíritu comunitario; al plantar, regar y cuidar un arbusto el alumnado hace más suyo su pueblo, estableciendo un vínculo permanente con la zonas verdes».
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