EDUCACIÓN
Amancio Ortega «ficha» a un estudiante utrerano de Los Salesianos para una beca en Canadá
Pablo Díaz estudiará primero de Bachillerato en tierras canadienses, gracias a una convocatoria en la que se han más de 10.000 estudiantes
A lo largo y ancho de todo el territorio nacional, 10.500 estudiantes se han presentado a la convocatoria que abre la fundación «Amancio Ortega» para que los jóvenes españoles puedan estudiar primero de Bachillerato en tierras estadounidenses o canadienses. Este gran número de estudiantes optaba sólo a 500 becas, un logro que ha conseguido el utrerano Pablo Díaz Cotrino, del colegio salesiano «Nuestra Señora del Carmen», quien en estos días está radiante de felicidad a causa de esta noticia y ya está planificando la aventura que va a vivir en el curso 2019-2020.
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En concreto el utrerano viajará hasta la capital de Canadá, a Ottawa, lugar en el que desde mediados de agosto de este año, hasta mayo de 2020, va a conocer un sistema educativo completamente distinto al español y va a cursar primero de Bachillerato. A lo largo del pasado otoño, Pablo ha ido superando una serie de pruebas , entrevistas y exámenes de idiomas, accediendo a una beca que se concede a los alumnos españoles que cuentan con un mejor expediente académico y que demuestran el dominio suficiente del inglés.
El curso pasado otro alumno de Los Salesianos de Utrera consiguió esta interesante beca
«Viajar al extranjero me motivaba mucho y opté por presentarme», asegura el joven utrerano, quien desde que surgió la posibilidad de conseguir esta beca ha contado con el apoyo de sus padres. Tras solicitar la beca en el pasado mes de septiembre y pasar posteriormente una serie de pruebas escritas y orales, a finales de enero, llegaba la buena noticia, que como explica el utrerano: «la verdad es que no me lo esperaba, estamos todos muy felices y orgullosos, me enteré un día justo cuando salía del colegio».
La beca sufraga todos los gastos durante un curso en tierras canadienses, en un periodo en el que para asegurar la integración del adolescente en una cultura completamente distinta a la propia, no está permitido que el becado vuelva a su país de visita ni que su familia viaje a Canadá. En el mes de marzo llegará el momento en el que Pablo tenga que viajar a Madrid durante un fin de semana, donde tendrá lugar un campamento de adaptación y conocerá más detalles acerca de la beca y de los estudios que va a realizar el curso que viene.
Canadá
«Poco a poco me voy haciendo a la idea, creo que lo voy a llevar bien y que no voy a tener ningún problema por estar tantos meses separado de mi familia», comenta el estudiante utrerano, quien está muy contento por el resultado del sorteo que deparó el destino, ya que desde el principio de esta andadura, tenía claro que « quería ir a Canadá y encima me ha tocado en la capital ». En cualquier caso, el utrerano es consciente que durante todo un curso va a echar de menos a los que han sido sus compañeros de clase durante varios años, por lo que asegura que «segundo de Bachillerato lo volveré a hacer en Los Salesianos, porque siempre he estudiado aquí y quiero terminar mi formación en este centro».
Un centro escolar, como es el caso del colegio salesiano «Nuestra Señora del Carmen», que ya tiene experiencia en estas lides , y donde se han mostrado «muy contentos y orgullosos, ya que el curso pasado otro de nuestros alumnos consiguió dicha beca».