universidad de cádiz
«Las universidades juegan un papel crucial en la prevención del suicidio»
Desde el Servicio de Atención Psicológica y Psicopedagógica de la UCA resaltan que el suicidio representa «un grave problema de salud pública, especialmente entre los jóvenes, siendo la principal causa de muerte no natural en este grupo de edad»
El Protocolo de Prevención de la Conducta Suicida de la UCA establece una serie de acciones para su aplicación en los cuatro campus, pero la actuación más relevante es «la que busca involucrar a toda la comunidad universitaria: profesorado, PTGAS y alumnado»
El equipo del Servicio de Atención Psicológica y Psicopedagógica (SAP) de la UCA está formado actualmente por dos psicólogas sanitarias, Ana Zamorano y María, y la directora, Mar López Sinoga. Las tres profesionales abordan con LA VOZ de Cádiz el Protocolo de Prevención de la Conducta Suicida que han elaborado junto con los compañeros Luis Ricardo León y Belén Román.
- ¿Cómo y cuándo surge la iniciativa de crear un Protocolo de Prevención de la Conducta Suicida, y cuánto tiempo habéis empleado en su elaboración?
- La idea surgió a partir de la creciente preocupación por la salud mental del estudiantado y la conveniencia de contar con herramientas preventivas del suicidio en la comunidad universitaria. Y su elaboración parte de trabajos previos realizados durante la trayectoria de nuestro servicio, y se termina de perfilar en el pasado curso 2023/24, participando en la elaboración diferentes personas que han formado parte del equipo de forma eventual, e incluso alumnado de prácticas extracurriculares.
- ¿Se da con este documento cumplimiento a alguna normativa en concreto que ordene la prestación del servicio en el ámbito universitario?
- El Protocolo de Prevención de la Conducta Suicida de la UCA se enmarca dentro del contexto legislativo español que aborda la salud mental y la prevención del suicidio como prioridades de salud pública. Aunque no hay una normativa específica sobre prevención de la conducta suicida que ordene la prestación del servicio en el ámbito universitario, sí existen diversas leyes y estrategias nacionales y autonómicas que sustentan su justificación y desarrollo.
Conocemos de primera mano el documento realizado por la Universidad de Málaga, y nos consta que otras instituciones académicas también han elaborado su propio protocolo, ya que mantenemos contacto con el resto universidades y tenemos reuniones anuales donde compartimos los trabajos que realizamos en cada servicio de atención psicológica.
- ¿Existe un número importante de consultas por cuestiones de salud mental en la UCA?, ¿ha aumentado la demanda?
- Sí, efectivamente, hemos observado un incremento constante en la demanda de nuestro servicio. Desde los inicios del servicio, hemos experimentado un crecimiento significativo en el número de consultas relacionadas con diversos aspectos de la salud mental, como ansiedad, depresión, estrés académico, dificultades en las relaciones interpersonales y problemas de adaptación.
- Una vez aprobado este protocolo, ¿cómo se debe actuar en los cuatro campus?, ¿se van a dar directrices al profesorado y al PTGAS?, ¿y se va a dar a conocer este protocolo al alumnado?
- El Protocolo de Prevención de la Conducta Suicida de la UCA establece una serie de acciones para su aplicación en los cuatro campus de la universidad. Pero la actuación más relevante es la que busca involucrar a toda la comunidad universitaria: profesorado, PTGAS (Personal de Administración y Servicios) y alumnado.
Se organizarán de talleres, charlas y actividades para sensibilizar a toda la comunidad universitaria sobre el bienestar emocional y la prevención del suicidio. El objetivo es que, a partir de la formación recibida, se creen figuras mediadoras dentro de la comunidad universitaria. Estas figuras, conocedoras del protocolo, velarán por su correcta aplicación y difundirán los recursos disponibles a los miembros de la comunidad.
El protocolo estará accesible a toda persona de la comunidad universitaria que lo necesite, junto a material complementario que estamos elaborando en estos momentos, como dípticos para tener la información más rápida, clara y accesible.
- ¿Se han atendido casos en la UCA de riesgos reales de suicidio?
- El suicidio representa un grave problema de salud pública, especialmente entre los jóvenes, siendo la principal causa de muerte no natural en este grupo de edad. Esta realidad subraya la importancia de abordar este tema de manera proactiva, especialmente en nuestro entorno universitario, el cual se ajusta a las edades en riesgo.
Las universidades juegan un papel crucial en la prevención del suicidio. Los campus universitarios son espacios excepcionales para fomentar el bienestar y la salud mental de los estudiantes. Durante esta etapa, los jóvenes enfrentan numerosos desafíos: transiciones a la vida adulta, cambios físicos y psicológicos, y la tarea de forjar su identidad y vínculos sociales. Todos estos factores pueden aumentar su vulnerabilidad.
Es importante destacar que la Universidad tiene la capacidad de inclinar la balanza hacia la prevención, reduciendo riesgos y potenciando recursos que promuevan una mayor sensación de pertenencia entre los estudiantes. La creación de espacios de encuentro, actividades grupales, ocio y deporte, pueden fomentar una cultura de compañerismo y cuidado mutuo, factores protectores fundamentales contra el riesgo de suicidio.
La Universidad de Cádiz, como comunidad con gran influencia social, tiene la oportunidad y la responsabilidad de ser punto clave en la prevención del suicidio. Al ser un espacio de formación de futuros profesionales, las universidades pueden tener un impacto significativo no solo en la salud mental de sus estudiantes actuales, sino también en la futura salud de nuestra sociedad.
Desde el SAP queremos poner énfasis en expresar nuestro agradecimiento a todo el equipo rectoral actual y a la gerente, por su compromiso con la salud mental. Su apoyo creando nuevas plazas y su apuesta por la inversión del crecimiento y estabilización de la plantilla, nos hace poder llevar a cabo iniciativas como ésta.
En conclusión, reconocemos la gravedad del riesgo de suicidio en la población joven y el papel fundamental que la universidad puede y debe desempeñar en su prevención. Estamos comprometidas con la implementación de estrategias integrales que incluyan la sensibilización, la formación, y la creación de redes de apoyo para proteger y promover la salud mental de nuestra comunidad universitaria.
