LA RINCONADA
La víctima del crimen de las cuñadas recibió 24 golpes en la cabeza y 61 puñaladas
La Fiscalía, la Junta de Andalucía y las defensas expondrán este viernes sus conclusiones e informes finales

Los médicos forenses que realizaron la autopsia a Anabel D.V., la mujer asesinada el 19 de abril de 2016 en La Rinconada y por cuya muerte se juzga en a Audiencia a sus dos cuñadas y al que era novio de una de éstas, han declarado este jueves en la cuarta sesión del juicio que esta mujer recibió 24 golpes en la cabeza y 61 puñaladas. Aunque han precisado que no existe ningún sistema para medir la intensidad del dolor, entienden que estas heridas «debieron ser muy dolorosas».
Desde el pasado lunes se juzga en la Audiencia a Rosa y Carmen N.S. y Francisco Javier M.R. como los presuntos autores de acabar con la vida de la que era pareja del hermano de las acusadas, fallecido unos meses antes de muerte natural, y con el que tuvo una hija. La Fiscalía pide para cada uno 25 años de prisión .
Los forenses han precisado que los golpes le fueron asestados con «un objeto contundente y de frente «, provocándole en algunas partes el hundimiento del cráneo, unas heridas que fueron »lo suficientemente importantes« como para haber provocado su muerte.
En ese primer momento, según han apuntado, «la víctima se defendió al presentar lesiones propias de defensa en las manos y en el brazo» y, posteriormente, «tuvo que caer al suelo donde recibió las puñaladas en el cuello y en la espalda «.
Reconstrucción de los hechos
En esta misma sesión se ha emitido un vídeo con la reconstrucción judicial de los hechos , en presencia de los tres acusados iniciales, dos de los que están siendo juzgados y otra hermana, Elena N.S., que fue exculpada dos años después de los hechos y tras llevar 26 meses en prisión cuando una testigo protegido en una nueva rueda de reconocimiento aseguró que ésta «no era la que había salido aquella mañana de la casa y se había montado en un coche», sino su hermana Carmen.
En el mismo, uno de los guardias civiles que va narrando los hechos señaló que la víctima sufrió un «ensañamiento continuo porque siguieron pinchándola ya muerta», descartando el móvil del robo , ya que en la vivienda, donde la víctima regentaba un quiosco, fue hallado dinero en efectivo.
Está previsto que el juicio concluya este viernes con la lectura de las conclusiones y de los informes definitivos de la Fiscalía, la Junta de Andalucía, y de las defensas.
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