Sevilla
Terminan las obras del osario para fusilados de la Guerra Civil en La Campana
El traslado de los restos óseos hallados en la fosa se pactará con los familiares

Hace dos semanas comenzaron las obras de construcción de un osario en el antiguo cementerio de La Campana , donde serán depositados los restos de los fusilados durante la Guerra Civil que se hallaron en ese mismo lugar hace casi cuatro años.
Dicho trabajo está a punto de concluir, algo que celebra especialmente el alcalde del municipio, Manuel Fernández Oviedo , quien afirma que con esta construcción el Ayuntamiento «cumple rigurosamente el compromiso adquirido con sus familiares de que los restos de sus seres queridos descansen para siempre en el lugar donde fueron encontrados».
Asimismo, el primer edil anuncia que «una vez esté listo el osario se procederá a consensuar con estas familias el traslado de los restos».
En este sentido, hay que destacar que todos los restos exhumados se encuentran en la actualidad guardados en cajas individuales y depositados en las dependencias del cementerio municipal.
Los restos de los represaliados que en breve serán depositados en el osario fueron encontrados a finales de 2014 cuando, a iniciativa del Ayuntamiento de La Campana, la Dirección General de Memoria Democrática de la Junta de Andalucía llevó a cabo diferentes trabajos para la localización y exhumación de una fosa común de la que se tenía constancia documentada.
La fosa común
Tras las diferentes intervenciones, se pudo constatar la existencia de una fosa común de 7,55 metros de largo por cinco de ancho ubicada en el sector oriental del antiguo cementerio municipal. En dicha localización se encontraron los restos de 35 cuerpos completos, 19 conjuntos articulados (restos óseos articulados entre sí pero a los que le faltan partes), así como un gran número de huesos sin conexión anatómica entre ellos. Todos los cuerpos presentaban evidentes signos de violencia .
Pese a que las tareas realizadas por el equipo de trabajo -formado por una antropóloga física, dos arqueólogas, una topógrafa delineante y un auxiliar especializado- no consiguieron identificar los cadáveres, a través de las investigaciones, hoy se sabe que a dicha fosa común se arrojaron los cuerpos de 141 personas , en su mayoría vecinos de La Campana aunque a lo largo de agosto de 1936 también se arrojó a otros represaliados de la comarca.
El último paso para honrar a los fusilados del 36 de La Campana y otros pueblos limítrofes será la colocación de una placa con el nombre de las personas identificadas, siempre en coordinación con la Junta de Andalucía , acompañada de un texto explicativo y de consenso que no pueda herir sensibilidades.