Cursos de verano
Los perros pueden ayudar a las personas en las dolencias afectivas
El experto en conducta canina Ricardo Valdivia interviene en los cursos de verano de la Olavide
Los perros de intervención pueden ayudar a las personas a mejorar sus dolencias afectivas y emocionales , así lo estima el experto en conducta canina Ricardo Valdivia, que ha participado en los cursos de la Universidad Pablo de Olavide en su sede de Carmona. Valdivia considera además que estos animales tienen gran importancia en la sociedad actual ya que favorecen y refuerzan funciones como el apoyo emocional, que hoy día están siendo desatendidas.
Entre los beneficios que cita del tratamientos con los canes indica su capacidad para favorecer la motivación, el cambio de actitud y el fomento de la participación de las personas en los procesos de mejora de enfermedades. Según indica « estamos lejos de compensar realmente lo que los perros han aportado a los seres humanos a lo largo de su historia de convivencia».
Ricardo Valdivia explica que la intervención asistida con perros tiene como finalidad facilitar la igualdad de oportunidades a personas en riesgo de exclusión social, ya sea niños, adultos o ancianos con alguna patología, ofreciendo atención sociosanitaria y educativa basada en el contacto entre personas y perros. Además, «con su labor se promociona el trato ético y responsable de los animales de compañía y se contribuye a la investigación de estas técnicas de intervenciones asistidas con animales». Entre las intervenciones en las que pueden participar los perros figuran las de mejora de la calidad de vida de niños con Síndrome del Espectro Autista, las de personas víctimas de violencia de género, personas mayores en residencias o jóvenes con problemas con la ley.
Valdivia señala que resulta necesario seleccionar cada ejemplar según la intervención que va a realizar y las personas con las que va a trabajar. De esta forma para un centro de mayores por ejemplo se empleará un perro de carácter tranquilo y aspecto afable. En un centro de jóvenes con problemas de conducta el ejemplar será dinámico, enérgico y de aspecto más duro.
El trabajo con los perros, indica, tiene la ventaja de que « ellos no juzgan, no no tienen estereotipos, muestran siempre afecto y no sienten lastima, cualidades esenciales para crear un canal de comunicación positiva, y una adecuada relación de ayuda».