Coronavirus en Sevilla
El Palmar de Troya, un pueblo que vive de las ferias y que se ha quedado paralizado por la Covid-19
El alcalde anuncia planes de choque, en un enclave en el que el «80% de la población activa vive de trabajar en las ferias»
Es un enclave de la campiña inevitablemente famoso por la Orden de los Carmelitas de la Santa Faz –conocida de manera popular como la iglesia palmariana-, pero es además el municipio más joven de la provincia de Sevilla, y que afronta con muchas incógnitas la crisis generada por la pandemia del coronavirus. El Palmar de Troya trata de encajar todas las dificultades aparejadas a la alerta sanitaria por la que está atravesando el país a todos los niveles, en una localidad que históricamente ha tenido altos niveles de desempleo, y donde el alcalde, Juan Carlos González (PSOE) ofrece un dato demoledor , que muestra las dificultades por las que ya están atravesando muchas familias, ya que «en torno al 80% de la población activa de El Palmar de Troya vive de las temporadas de ferias, trabajando en el sector de la hostelería».
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Así, una tras otra, todas las tradicionales ferias de la provincia hispalense y otras provincias andaluzas se han ido suspendiendo por razones obvias, por lo que han sido numerosas las familias de El Palmar de Troya que han dejado de percibir ingresos muy importantes, que en cierta manera les servían para seguir adelante durante varios meses. Se trata de una población, que históricamente ha vivido de estas temporadas, teniendo además una importante dependencia del sector de la agricultura, donde prácticamente no existe ni una sola industria. En otros años, cuando llegaba la temporada de ferias, incluso descendía de una manera notable la población de El Palmar de Troya, ya que muchos de sus habitantes abandonaban sus domicilios para trabajar en el mundo de la hostelería, encadenando una feria tras otra, formando parte de tradicionales empresas que son famosas en muchas localidades por su buen hacer en el sector.
En El Palmar de Troya hay media docena de empresas de catering que realizan las ferias más importantes
En El Palmar de Troya hay media docena de empresas de hostelería que de marzo a septiembre se dedican de manera intensiva a las ferias, empleando cada una de ellas a más de una veintena de personas , ofreciendo sus servicios en las ferias de Mairena del Alcor, Sevilla, Dos Hermanas, Jerez de la Frontera, Utrera o Málaga.
Juan Carlos González, es la persona que ha liderado a lo largo de la última década el ilusionante proyecto de la segregación de Utrera, que se hacía factible en octubre de 2018, y ha explicado que se trata de un asunto que le preocupa mucho, asegurando que «hay que tener un plan de futuro, ya que estamos atravesando un momento difícil». Por eso, el primer edil palmareño, está convencido de que su pueblo «al depender tanto el trabajo del sector de la hostelería, va a ser uno de los principales afectados y por eso estamos preparando un plan de ayuda y colaboración ». Así que el futuro al que se enfrenta la localidad no es sencillo, ya que todo hace indicar que pasará mucho tiempo hasta que puedan volver a celebrarse con normalidad las tradicionales ferias, que suponían una inyección fundamental para la economía doméstica en El Palmar de Troya.
Infraestructuras
En mayo de 2019, tras la celebración de las elecciones locales, El Palmar de Troya iniciaba un nuevo camino como municipio independiente, y ahora, siendo todavía una localidad en construcción, se tiene que enfrentar ante una prueba ciertamente dura, que está siendo difícil incluso para las localidades que disponen de más medios e infraestructuras.
La corporación municipal palmareña ha tenido que adaptarse a la situación, y como explica el propio alcalde, «yo creo que en este mes y medio España se ha puesto en la vanguardia del teletrabajo muy rápidamente», al igual que precisa como el Ayuntamiento de El Palmar « está cerrado y solo estamos los concejales, mientras que el resto están teletrabajando. Se hacen plenos y juntas de gobierno de manera telemática».
Estado de alarma
Una localidad como El Palmar de Troya no dispone de fuerzas de seguridad propias, por lo que para el cumplimiento de las disposiciones del estado de alarma, están teniendo en estos momentos la ayuda de algunos efectivos de la Guardia Civil y de la UME , que en varias ocasiones han hecho presencia en el pueblo y han patrullado por sus calles, aunque el ambiente en todo momento se ha mantenido dentro de la normalidad. También han colaborado en estos momentos efectivos de la Policía Local, gracias a convenios suscritos con otras localidades cercanas. A la hora de diagnosticar como se está viviendo esta situación excepcional en El Palmar de Troya, el alcalde explica que «los vecinos se están portando perfectamente y están afrontando el virus con mucha efectividad», aunque lógicamente «tal y como ha ocurrido en prácticamente todas las localidades, también se han tenido que poner algunas sanciones».
Por ello hasta el momento, aunque sean muchas las familias que miren el futuro con incertidumbre, desde el punto de vista sanitario la situación está muy controlada en El Palmar de Troya, donde el alcalde confirma que «hasta el momento sólo hemos tenido conocimiento de una persona contagiada por coronavirus».
Un instante en el que se están poniendo a prueba numerosos aspectos para una ciudad con pocos recursos como es El Palmar de Troya, aunque en materia de telecomunicaciones, Juan Carlos González explica que la situación se está viviendo sin ningún tipo de problema ya que « tenemos muy buenas conexiones y con tres empresas que cuentan con una muy buena fibra óptica que funciona a la perfección».
Los miembros de la iglesia palmariana viven estos días un doble confinamiento
Inevitablemente despierta la curiosidad como se está viviendo este momento en la orden de los carmelitas de la Santa Faz, la conocida iglesia palmariana, que habitualmente destaca por vivir de una manera muy austera y aislada del exterior detrás de los altos muros de hormigón que aíslan su basílica de miradas indiscretas. En cierta manera, ellos viven ya desde hace muchos años su particular confinamiento. En ese sentido, el alcalde explica que «los miembros de la orden están tomando las mismas medidas de precaución que todo el mundo. Celebran sus misas únicamente entre quienes residen en el interior del recinto, sin que acudan personas de fuera, estamos en coordinación con ellos».