Cultura
La nueva vida del museo de Marchena está dedicada al escultor local más universal: Lorenzo Coullaut Valeraes
El Ayuntamiento recopila parte del legado artístico en el reformado espacio museístico de la ciudad
El monumento a Gustavo Adolfo Bécquer en el Parque de María Luisa, la estatua de Cervantes en Madrid o la imagen del primer billete de 100 pesetas. El legado del escultor marchenero Lorenzo Coullaut Valera es incontable y ahora su pueblo dispone de nuevo de un museo que lo recopila, con una imagen nueva, más accesible y moderna.
El edificio ha sido objeto de una reforma para que siga siendo uno de los referentes de la cultura no sólo en este municipio, sino en la comarca, convirtiéndose en una de las ofertas culturales más destacadas.
Coullaut Valera fue uno de los escultores más relevantes de la primera mitad del siglo XX , cuya obra se reparte por numerosas ciudades, sobre todo en Madrid y Sevilla, donde realizó variados monumentos públicos.
Saber dónde se encuentra su obra es imposible. Está repartida, literalmente, por todo el mundo. Ahora, en el interior de la antigua Puerta de Morón de Marchena se reúne una parte de esta valiosa colección de esculturas y bocetos de ese autor representativo de la cultura y estética regionalista propia de su época.
La delegada de Turismo del Ayuntamiento de Marchena, Teresa Jiménez, explica que «tiene repartidas grandes obras por toda la geografía española , y para nosotros es nuestro gran artista. El único objetivo de esta reforma ha sido poner en valor su trabajo, y lo hemos ubicado en un lugar muy especial del patrimonio de Marchena, en un espacio limitado, con obras que estaban mal distribuidas en el espacio, con soportes muy deteriorados, de modo que se perdía visibilidad y majestuosidad en las obras».
Ahora, todas las obras están señaladas con soportes metálicos en color oro, lo que le da elegancia y porte a la exposición. Además, se reimprimen fotografías del escultor junto a algunas de sus obras , o del escultor trabajando en uno de sus bustos.
La delegada añade que «se ha hecho una intervención de iluminación artística de las obras». El trabajo lo ha realizado el interiorista marchenero Antonio Ternero. Para que todo tenga más detalle, se ha tenido en cuenta que Coullaut Valera siempre hacía un boceto de sus obras antes de realizar las definitivas , con lo que el museo cuenta con varios de sus bocetos, salidos de sus manos, mente y arte.
La delegada añade que el Ayuntamiento tenía «mucho interés en impregnar la colección de una imagen propia , y se ha elegido la simbología arabesca, que ahora es muy visible en todo el diseño del interior de la colección, incluso en los ventanales y puerta del museo, con vinilos con simbología árabe».
Noticias relacionadas