Lebrija

El juez abre juicio oral contra el asesino de la hija de la cantaora Juana Amaya

El exmarido de la víctima se enfrentará a una posible condena por asesinato con ensañamiento

La Guardia Civil tuvo que proteger a Manuel en la entrada de los juzgados donde le esperaban muchos vecinos A. H.

SILVIA TUBIO

El pasado 9 de diciembre se cumplía un a ño de la muerte de María del Castillo Vargas , una lebrijana de 37 años que fue brutalmente asesinada por su exmarido. El crimen de la hija menor de la conocida cantaora de flamenco Juana Amaya (antigua componente del grupo Las Corraleras) dejó conmocionada a la localidad, que guardó luto por la pérdida que acababa de sufrir una familia muy querida en Lebrija . María del Castillo se convirtió en la víctima número 50 de la violencia machista en 2015.

Un año después, el juez que ha dirigido de manera discreta la investigación judicial por este crimen ha concluido las diligencias y ha dictado la apertura de juicio oral contra el único sospechoso en la causa, la expareja de la víctima: Manuel R. M., de 41 años.

Fuentes del TSJA han confirmado a ABC que el juez del Instrucción número 2 de Lebrija ha dictado el auto de apertura de juicio oral el pasado martes. Manuel R. M. será juzgado por los delitos de asesinato, allanamiento de morada y quebrantamiento de medida judicial . En cuanto al asesinato , el instructor concluye que el exmarido de María del Castillo se ensañó con la víctima y actuó con alevosía.

El auto está siendo notificado a las partes, que deberán proceder a calificar los hechos. Fuentes judiciales han confirmado que la instrucción se ha desarrollado sin incidencias procesales y a «un buen ritmo»; lo que hace presagiar que el juicio se celebre en los próximos meses.

«Por esto me van a caer 15 años, pero el problema lo he resuelto» dijo Manuel al confesar el crimen

Manuel R.M. había confesado ya la autoría del crimen cuando pasó a disposición judicial dos días después del terrible crimen. Fue titular de los periódicos la frase que pronunció cuando fue detenido en el centro de salud donde había acudido a curarse las heridas que se había inflingido: «Por esto me van a caer 15 años, pero el problema lo he resuelto».

Admitió que se había colado en la vivienda de su exmujer con intención de matarla porque había tenido acceso a unos mensajes íntimos de móvil que había recibido María del Castillo.

Otro fallo del sistema de protección

Tras entrar en la casa de la víctima, la golpeó, la apuñaló y la tiró por el balcón del inmueble. Después cogió su coche y pasó por encima del cuerpo de la madre de sus dos hijos. Los pequeños tienen ahora doce y ocho años y aquella noche se encontraban en casa de la abuela materna. Una información que conocía el asesino y que aprovechó para sorprender a su exmujer a solas.

La pareja llevaba separada hacía meses. En el entorno de la víctima culpan del consumo de drogas a la transformación radical en el carácter del acusado, que se volvió violento con María del Castillo. Ella decidió dar el paso y no sólo rompió la relación sino que lo denunció . Lo hizo en dos ocasiones. La primera en junio cuando fue amenazada por Manuel, quien no admitía la ruptura. La segunda, en noviembre. El juzgado dictaba el 27 de ese mes una orden de alejamiento . Pero una vez más, como ocurriera este año con la joven asesinada en Olivares , el sistema de protección de las víctimas de violencia machista falló. Doce días después de la medida acordada por el juzgado, María del Castillo era asesinada.

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