Detenidos unos padres de Coria que tenían escondidos a sus tres hijos para no entregarlos a la Junta de Andalucía
Los menores estaban desaparecidos desde 2017 cuando la Administración ordenó la retirada de la custodia tras declararlos en desamparo
La Policía Nacional ha detenido en Coria a los padres de tres niños que mantenían escondidos para que el Servicio de Protección de Menores de la Junta no pudiera llevárselos a un centro. Los niños habían sido declarados en desamparo en 2017 y desde entonces permanecían oficialmente desaparecidos hasta que el pasado 3 de marzo, un dispositivo policial accedió a la vivienda que había ocupado la familia en Coria y localizó dentro a los niños.
Según ha explicado la Policía Nacional en un comunicado, en 2017 la Junta ordenó la retirada de los niños, que entonces tenían 2,3 y 8 años. La familia vivía en el Polígono Sur pero cuando la Policía acudió al domicilio para ejecutar la orden y llevarse a los pequeños a un centro de protección , constataron que los padres se habían marchado con los hijos. «Todas las gestiones realizadas para localizar a los padres y a los menores resultaron infructuosas», ha asegurado la Policía.
Lo cierto es que han transcurrido cuatro años hasta que el pasado mes de febrero, agentes de la Comisaría de Policía Nacional de Coria de Río compartieron con la unidad de la Policía Nacional adscrita a la Junta de Andalucía los datos de un matrimonio que había sido identificado por los agentes después de que hubieran ocupado un piso en esa localidad del Aljarafe.
Se trataba del mismo matrimonio que había abandonado el Polígono Sur pero no había ni rastro de los menores. Los agentes decidieron vigilar la vivienda. Así, comprobaron que los dos adultos eran las únicas personas que salían de la vivienda y además adoptaban medidas de seguridad a la hora de marcharse. Un comportamiento que resultó extraño a los agentes.
Los tres niños de 6,7 y 12 años no salían nunca a la calle. No iban al colegio ni tampoco al médico
La vivienda disponía de una puerta blindada antiokupa que carecía de llaves para su apertura. Cuando los progenitores regresaban, la golpeaban a modo de contraseña y era entonces cuando uno de sus hijos la abría desde dentro.
«Los tres hermanos no acudían al colegio ni asistían al médico, siendo privados de su normal desarrollo evolutivo y emocional al ser obligados a permanecer encerrados en el domicilio, privándoles de su libertad deambulatoria», ha explicado la Policía Nacional.
El pasado 3 de marzo , la Policía realizó un operativo para poder acceder al domicilio, donde encontraron a los menores, los cuales fueron entregados a los servicios de protección de menores de la Junta de Andalucía. Los padres fueron detenidos y puestos a disposición judicial. A la madre le imputan los delitos de sustracción de menores y detención ilegal y al padre, además, atentado a agente de la autoridad, por agredir a un policía mientras permanecía custodiado en los calabozos.
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