Cuatro investigados en Montellano por estafa y fraude con gasóleo tipo B

La Guardia Civil ha decomisado en Montellano más de 20.000 litros de gasoil tipo B adulterado para que pareciese gasoil tipo A, inmovilizando otros 15.000 litros de gasoil rojo tipo B, preparado para procesar. Cuatro personas están siendo investigadas por presuntos delitos de estafa y fraude a la hacienda pública.

Según el Instituto Armado, en el mes de abril se supo que en el polígono industrial de Montellano se estarían produciendo movimientos anómalos de camiones cisterna de combustible. Teniendo en cuenta que en dicho polígono no existe ninguna empresa autorizada para el comercio, distribución, almacenamiento o cualquier otra forma de tratamiento de hidrocarburos, agentes del puesto de la Guardia Civil de Montellano localizaron una nave industrial en el Polígono Geribel de la localidad, que desprendía un fuerte olor a gasoil y no presentaba ningún rótulo identificativo de estar siendo utilizada por empresa o para actividad alguna, hasta el punto de tener un cartel en la fachada donde figuraba el mensaje de «se alquila».

Continuando con las indagaciones , averiguaron que la nave estaba alquilada, por lo que los agentes comenzaron a realizar operativos para recabar datos sobre la actividad en el lugar, siendo a finales de mayo cuando se intervino, sorprendiendo a los implicados cuando realizaban una operación de carga de combustible .

Como consecuencia de esta actuación fueron decomisados más de 20.000 litros de gasoil que había sido ya procesados y otros 15.000 preparados para procesar.

El camión intervenido pertenece a una empresa con domicilio social en la localidad de Espera (Cádiz), dándose la circunstancia de que el arrendatario de la nave también colaboraba con las labores de carga.

El modus operandi consistía en transportar hasta Montellano en un camión cisterna habilitado, gasóleo tipo B bonificado. Una vez en la nave, lo transbordaban a un depósito donde lo procesaban para darle apariencia de gasoil tipo A, pasándolo a continuación a un segundo depósito para su almacenaje y final transporte al camión cisterna para su posterior venta. El valor de lo defraudado ascendería a más de 16.000 euros , con la circunstancia además de que se trataba de un producto con diferente refinado y calidad.