Sucesos
Se busca a un desaparecido de Lebrija que fue visto en el entorno de la estación de tren de Dos Hermanas
José Antonio Mirandas lleva en paradero desconocido desde el mediodía de este lunes, tras marcharse a Dos Hermanas pese a haber dejado una nota escrita avisando a sus familiares de que iba a la piscina municipal lebrijana
Un vecino de la localidad sevillana de Lebrija se encuentra desaparecido desde las primeras horas de la mañana de este pasado lunes, cuando se marchó del domicilio familiar que habita tras dejar una nota escrita avisando de que iba a la piscina del polideportivo municipal. No obstante, nunca llegó a las instalaciones deportivas lebrijanas pero sí a la estación de tren de la localidad, donde fue visto antes de las 7 horas de la mañana, según ha relatado a ABC de Sevilla una familiar del desaparecido.
Se trata de José Antonio Mirandas Cano , un varón de 34 años de edad de ojos marrones con gafas de vista, una estatura de 1,87 metros y un peso próximo a los cien kilos . En el momento de su desaparición, José Antonio vestía un chándal azul oscuro que en su parte inferior luce un número sobre un círculo blanco. Calza zapatillas deportivas oscuras y porta una llamativa mochila de colores azul oscuro y rojo.
Según han contado a este periódico familiares del desaparecido, la Guardia Civil les ha informado que José Antonio fue visto por al menos dos personas en la estación de Lebrija a primera hora de este lunes –algo que han confirmado las grabaciones de las cámaras de seguridad de la estación lebrijana–, desde donde habría tomado un Cercanías hasta la localidad sevillana de Dos Hermanas .
Visto por última vez en Dos Hermanas
En este otro municipio sevillano habría estado José Antonio durante al menos un par de horas en el entorno de la estación de tren nazarena. Así, se le pudo ver tomando algo en la cafetería-cervecería La Alacena entre las 12 y las 14 horas de este lunes, según ha indicado una empleada del citado establecimiento. Es aquí donde se le pierde la pista por completo a José Antonio.
Al parecer, José Antonio comentó en el local que se encontraba allí con idea de tomar un nuevo tren con destino Granada «para ver a un amigo». Este extremo no ha podido ser confirmado aún por los investigadores del caso y extraña en cierto modo a sus familiares, ya que no les consta relación alguna de José Antonio con alguien afincado en Granada.
El desaparecido en Lebrija dejó una nota manuscrita en su domicilio para tratar de justificar su ausencia
Desde el momento de su desaparición, el teléfono de José Antonio Mirandas se encuentra no operativo , lo que dificulta tanto su localización como que sus familiares puedan ponerse en contacto con él para conocer directamente su estado. Sin embargo, sus familiares creen que podría haberse llevado el cargador de su teléfono junto a otros enseres como documentación, las llaves de la casa familiar que habita y algo de dinero.
Escribió una nota manuscrita
En la propia casa que ocupa dejó una nota escrita avisando de que se marchaba temprano a la piscina municipal del polideportivo de Lebrija «para recuperar unas clases de natación que había perdido la semana anterior», según relatan fuentes de la familia.
José Antonio Mirandas Cano es soltero y sin hijos . Sus familiares, que poco después de su desaparición interpusieron denuncia ante la Guardia Civil de Lebrija, agradecen cualquier tipo de información sobre su paradero que se pueda facilitar a los investigadores, algo que es posible hacer en los teléfonos gratuitos 062 o 112 .