Amenaza a sus vecinos con «tirotearles» tras denunciarla por hacer fiestas en plena pandemia

La Guardia Civil irrumpía en la finca de la imputada en Utrera donde había 100 personas

Urbanización Los Granadillos donde se celebraba la fiesta ilegal que desmontó la Guardia Civil ABC

Silvia Tubio

La convivencia entre vecinos puede resultar difícil, sobre todo si quien vive al lado hace caso omiso a las normas decretadas en mitad de una pandemia sanitaria y amenaza de muerte a los que deciden denunciar este comportamiento a las autoridades. En esa tesitura se encuentran los residentes de una de las urbanizaciones que hay en el extrarradio de Utrera: Los Granadillos. Amenazados por una vecina con dispararles y expulsarlos de su casa, temen que termine cumpliendo con su palabra .

La Guardia Civil irrumpía hace unos días en la fiesta que había organizado esta mujer en su finca. No es la primera vez que se saltaba las limitaciones impuestas desde que se estableció el confinamiento y el posterior proceso de desescalada. En el comunicado remitido este viernes por la Guardia Civil se detalla que en la parcela había cien personas. No fue fácil convencerles de que debían marcharse a pesar de que en la fase 2 en la que se encuentra la provincia sevillana, sólo se permiten reuniones de quince personas .

«Tras vivirse momentos de tensión y de desobediencias iniciales, finalmente se consigue que el desalojo de las cien personas se realizara de manera escalonada y ordenada, con la única excepción de un individuo que alteró gravemente el orden público, a la vez que desobedecía y amenazaba a los agentes presentes». Esta persona, un hombre de 49 años y vecino de Dos Hermanas , fue detenido, confirma la Benemérita.

«Me voy a enterar bien de quién ha llamado y cuando me entere, que mejor se vaya del campo y me lo deje a mi porque lo voy a tirotear»

Pero esta intervención policial tuvo más repercusiones. La propietaria de la finca usó el grupo de whatsapp que tienen los vecinos de la urbanización para lanzar graves amenazas de muerte que le han valido finalmente una imputación. Este periódico ha tenido acceso a esos audios en los que claramente advierte a los vecinos de que va a hacer indagaciones a través de su abogado para saber quién realizó la llamada de teléfono que alertó a la Guardia Civil de que se estaba celebrando la fiesta ilegal. Algo del todo imposible porque esa información no se revela, según confirman a ABC fuentes de la Benemérita.

«Llamastéis para que viniera aquí un ejército, como si fueran a hacer un registro y yo tuviera 20 kilos de droga. Me cago en todos vuestros muertos y que salgan saltando y bailando de la tumba. Cada vez que hago una fiesta me hacéis lo mismo. El que tenga cojones que venga a la cara y me lo diga», afirma esta vecina en uno de los audios que ya obran en poder de la Guardia Civil y que han servido para que sea citada este viernes en calidad de imputada en el cuartel de Dos Hermanas, localidad donde reside.

« Me voy a gastar el dinero en el abogado, pero me voy a enterar bien de quién ha llamado y cuando me entere, que mejor se vaya del campo y me lo deje a mi porque lo voy a tirotear. Y eso seguro, que el campo lo pierde». En los audios admite, además, que la Guardia Civil ya ha ido a su casa por el mismo motivo hasta «20 veces» y advierte que «menos mal» que no se la llevaron detenida esta última vez porque si hubiera ocurrido eso, advierte: «entran tiros desde que llego hasta que salgo».

Las amenazas vertida s son la base de una investigación contra esta vecina por amenazas y por un delito contra la Administración de Justicia por intentar influir en testigos de un hecho delictivo; además del delito de desobediencia por organizar una fiesta ilegal.

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