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Senderos para disfrutar en Cádiz este otoño: joyas al alcance de los pies y de los ojos
Caminatas por todo tipo de paisajes y entornos para disfrutar solos o acompañados; recorridos para los más atrevidos y para planes familiares
La provincia de Cádiz puede presumir sin vanidad de ofrecer a sus vecinos y visitantes paisajes espectaculares. Las rutas que se pueden hacer a pie y en contacto con la naturaleza, una necesidad para muchos cuando el verano toca a su fin y llega el otoño, transcurren por todo tipo de entornos... ofreciendo a los ojos desde las tradicionales marismas a impresionantes acantilados pasando por grandes bosques y pinares.
Y es que los diversos parques naturales que se encuentran en Cádiz hacen posible que el senderismo, llegadas estas fechas, sea uno de los mejores planes que se pueden hacer tanto solo como acompañados.
Existen propuestas diversas que van desde recorridos complejos y largos para los más exigentes y atrevidos hasta otros más cortos y asequibles perfectos para los planes familiares de un fin de semana.
Cádiz, como el resto de Andalucía, reúne todos los requisitos y ofrece las mejores condiciones para la práctica del senderismo. Su buen clima y unos espacios naturales que cobijan áreas espléndidamente conservadas y la mayor diversidad de paisajes y ecosistemas de Europa suman para crear la mejor oferta de naturaleza y senderismo.
Y es que la tierra se descubre al caminar. Disfruta la de la provincia de Cádiz paso a paso, sin prisas, a través de su amplia red de senderos, homologados y señalizados, que conectan y comunican el territorio, mostrando sus entrañas y secretos más ocultos.
Pero hacer senderismo no es sólo caminar. Accede a lugares, paisajes y rincones inesperados y de singular belleza. Entra en contacto con los lugareños, conociendo su historia, cultura, costumbres y tradiciones. Saborea los mejores frutos y platos de la tierra, a través de sus tradicionales fogones o de la gastronomía más innovadora. Percibe como cambian del verano al otoño los colores y luces, sus olores y sonidos, sensaciones y matices que adornan el trayecto haciéndolo inolvidable.
Sendero Europeo Peloponeso: de Atenas a Tarifa
El Sendero de Gran Recorrido GR 7, Sendero Europeo E-4, es el más largo de Europa, tiene su inicio en el Templo de Delfos en Grecia y finaliza en Tarifa.
Se convirtió en el primer sendero intercontinental, siendo ampliado por los dos extremos. También se inauguraron los primeros kilómetros en Chipre; y por el lado de África, se une al A-1, que comienza en Ceuta recorriendo el norte de África e internándose en el continente hasta llegar al Sahara.
Entra en Andalucía por el municipio granadino de La Puebla de Don Fadrique y, ante las impresionantes vistas de la Sierra de la Sagra, se divide en dos ramales: Ramal Norte y Ramal Sur. Comunica pueblos de las provincias de Jaén, Córdoba, Granada, Almería, Málaga y Cádiz, con 1.280 kilómetros de sendero señalizados recorre diez parques naturales.
En su recorrido por la provincia de Cádiz sorprenderán los contrastes de paisajes de los tres parques naturales que atravesaremos: P. N. de Grazalema, P. N. de Los Alcornocales y P. N. del Estrecho, hasta llegar al municipio de Tarifa, donde termina el sendero.
Sendero El Pinsapar: pinsapos y quejigos
Este sendero nos sumerge en el bosque de pinsapos, abeto singular que propició la declaración de estas sierras como Reserva de la Biosfera y Parque Natural Sierra de Grazalema.
El Sendero El Pinsapar - PR-A 347 comienza en el lugar conocido como Las Canteras o Los Areneros debido a las canteras que aquí se encuentran, a un par de kilómetros de Grazalema, en la carretera que sube al Puerto de las Palomas. Comienza a ascender entre pinos de repoblación que han permitido frenar la alta erosión del suelo provocada por las intensas lluvias. De hecho, esta zona posee uno de los índices pluviométricos más altos de España.
Ganando altura el camino alcanza el Puerto de las Cumbres, paso natural a la vertiente norte de la sierra del mismo nombre, desde donde la vista es soberbia, permitiendo ver la Serranía de Ronda a nuestras espaldas y una gran extensión de la Zona de Reserva delante nuestro. Se divisa también el Torreón, el pico más alto de la provincia de Cádiz, y algunos pinsapos que anuncian la proximidad del bosque.
Tendrá la posibilidad de adentrarse en el pinsapar, donde llamará nuestra atención la escasa luz que penetra en el bosque. El pinsapo pertenece a una de las nueve especies de abetos que viven en las montañas que circundan el Mediterráneo. En concreto, esta sólo se encuentra en Andalucía en la Serranía de Ronda y la Sierra de Grazalema, donde se extiende sobre la Sierra del Pinar.
Generalmente se ubican en laderas norte, protegidos de la excesiva insolación y la consiguiente pérdida de humedad, lo que genera un bosque denso y umbrío en el que los ejemplares compiten por la luz, dejando sin hojas sus ramas más bajas y un sotobosque escaso y reducido a unas pocas especies.
Los bosques de pinsapos estuvieron mucho más extendidos hace millones de años, cuando las condiciones climáticas eran muy diferentes a las actuales. Se trata, pues, de un vestigio de aquellos tiempos, una joya botánica restringida a un área de distribución muy reducida.
Más adelante, los pinsapos cederán el protagonismo a los quejigos, descendiendo ya por una pista en busca de la pequeña población de Benamahoma. Sobre los tajos de la sierra será posible ver a las chovas y los buitres volando en círculos, como observándonos atentos.
Garganta Verde: un espectáculo
Garganta Verde es un espectacular cañón de roca originado por el azote de las aguas del arroyo Bocaleones que acaba en una cavidad llamada Cueva de la Ermita o Ermita de la Garganta, por el parecido con la cúpula de un templo religioso. Además, este enclave emblemático es el hábitat de una importante colonia de buitres leonados. Se trata de una zona de acceso restringido por lo que hay que solicitar autorización a la Consejería de Medio Ambiente. Está situado a unos 5 kilómetros de la localidad de Zahara de la Sierra, en pleno Parque de la Sierra de Grazalema.
AVISO IMPORTANTE DE LA JUNTA DE ANDALUCÍA:
Se prohíbe acceder a este sendero con animales de compañía, por encontrarse en el área de reserva.
Sendero sujeto a autorización administrativa. Para particulares se gestiona en el centro de visitantes El Bosque, preferentemente por correo electrónico: cvelbosque@reservatuvisita.es, o en el teléfono: 956709733. Las empresas de turismo activo, clubes, asociaciones, federaciones o grupos legalmente constituidos deben dirigirse a la Oficina del Parque Natural, teléfonos: 600161916/ 600161906.
Del 1 de junio al 15 de octubre, debido al riesgo alto de incendio forestal, el acceso sólo está permitido hasta el primer mirador, excepto para aquellas personas que realicen el descenso integral de la garganta hasta Zahara de la Sierra (descenso de barrancos), para lo que deberá contarse con preparación y material adecuado.
Existe la posibilidad de realizar la actividad de barranquismo desde el final del sendero de la Garganta Verde hasta la gruta de la Ermita.
Dicha actividad consiste en el descenso de aproximadamente 300 metros de barranco, distancia existente entre el final del sendero hasta la ermita, y para ello es necesario obtener la autorización de barranquismo, así como disponer de conocimiento y equipo especializado, advirtiéndose de que su práctica puede albergar riesgos para la seguridad.
La Garganta verde está considerada como uno de los paisajes más emblemáticos de la Sierra de Cádiz. El sendero que discurre por este cañón, resultado del proceso erosivo que durante milenios ha ejercido el Arroyo Bocaleones, nos permite sumergirnos en un paisaje que mezcla excepcionales cortados, con una exuberante vegetación mediterránea.
Este cañón acoge una de las colonias de buitres leonados más numerosa de Europa. Estos carroñeros llegan a medir unos dos metros y medio de envergadura y un metro de altura. Su vuelo resulta majestuoso, aprovechando las corrientes de aire ascendentes para elevarse describiendo círculos y manteniendo luego una trayectoria lineal. A veces, vuelan tan bajo que, si vamos en silencio, podemos incluso escuchar el tenue ruido que hacen sus alas al friccionar con el aire.
El sendero de la Garganta Verde nos permite acceder hasta el lecho del arroyo por un acusado descenso sobre el que planearán los buitres que, desde sus nidos en pequeñas plataformas en las verticales paredes del cañón, se lanzan dibujando círculos en el aire.
Sendero de los Arriates: los corrales de Pesca
El recorrido por el sendero de los Arriates comienza en el Centro de Interpretación de la Naturaleza y el Litoral 'El Camaleón' y atraviesa la zona del Cordón Dunar, comprendida entre la playa de Camarón y la playa de las Tres Piedras, mediante unas pasarelas de madera elevadas.
La travesía está flanqueada en todo su recorrido por flora local, destacando los lentiscos y las retamas blancas. Entre la fauna cabe destacar el camaleón común, la culebra bastarda, el lagarto ocelado y distintas aves insectívoras.
Durante todo el recorrido aparecen diversas pasarelas que dan acceso a la playa, desde donde podemos admirar los Corrales de Pesca, construcciones creadas por el hombre para atrapar peces aprovechando la subida y bajada del mar.
Sendero Novo Sancti Petri: un bonito paseo
El Sendero Novo Sancti Petri en Chiclana de la Frontera es un recorrido de 1.37 kilómetros que se desarrolla paralelo a la playa de La Barrosa.
Este sendero, ubicado sobre dunas estabilizadas, está profusamente vegetado con especies autóctonas como sabinas, lentiscos, carrascas y pinos piñoneros.
Ofrece vistas magníficas de la playa de La Barrosa y del Castillo de Sancti Petri. El sendero finaliza en la Torre del Puerco, una torre vigía del siglo XVI.
Es un lugar ideal para los amantes de la naturaleza y el senderismo, ofreciendo una auténtica inmersión en la belleza natural de Andalucía.
Sendero Torre de Meca: gran experiencia
El Sendero Torre de Meca es un recorrido de 4,3 kilómetros que ofrece una experiencia única de senderismo en el Parque Natural La Breña y Marismas del Barbate.
Comienza en el Área Recreativa Majales del Sol y transcurre por un camino de arena rodeado de pinares costeros y una arboleda de eucaliptos.
El sendero lleva a la Torre de Meca, una torre vigía del siglo XVII, y a un mirador con vistas espectaculares del Faro de Trafalgar y los Caños de Meca. Este sendero es ideal para familias y ofrece una inmersión en la belleza natural de Andalucía.
Red de senderos y pasarelas litorales de Rota
La Red de Senderos y Pasarelas Litorales de Rota es un recorrido de 6,46 kilómetros que se extiende a lo largo del litoral de Rota. El sendero, que se realiza sobre pasarelas de madera, atraviesa el pinar de Rota y conecta con accesos a las playas y miradores, ofreciendo vistas panorámicas.
Durante el trayecto, los senderistas pueden disfrutar de la flora y fauna local, así como de las impresionantes vistas al mar.
Este sendero es ideal para familias, parejas, grupos de amigos y viajeros solitarios que buscan una experiencia de senderismo tranquila y relajante en la hermosa costa de Andalucía.
Sendero del Río Majaceite: uno de los grandes clásicos
Se trata de una de las rutas más conocidas de la provincia de Cádiz por unir dos de los pueblos más bonitos de la Sierra: El Bosque y Benamahoma.
El sendero es lineal, tiene poco más de 4 kilómetros muy sencillos y se recorre en unas dos horas. Gracias a su trazado por la vera del río Majaceite, el paseo está lleno de vegetación y agua, por lo que es fresco e ideal para hacerlo con niños en cualquier época del año.
Es un agradable paseo desde El Bosque a Benamahoma, acompañados por el río Majaceite, que, también es llamado ría de El Bosque y es hábitat de las esquivas nutrias. Descubriremos un excelente bosque de galería; chopos, fresnos y olmos, y observaremos los intentos de aprovechar el curso de agua para generar energía como molinos y la Eléctrica de la Sierra, antigua central. Muy recomendable es la visita al Ecomuseo Molino de Benamahoma.
Subida al Picacho: cumbre emblema de Los Alcornocales
Este itinerario tiene su comienzo en el área recreativa El Picacho, próximo al aula de la naturaleza El Picacho. La subida al Picacho, cumbre emblema del Parque Natural Los Alcornocales, nos permitirá conocer de cerca la sierra del Aljibe, segunda más alta de la provincia con 882 metros de altura, de la que buena parte de ella quedará a nuestra vista. La dificultad relativa del ascenso, se ve recompensada especialmente por las vistas de gran parte de la provincia de Cádiz: Alcalá de los Gazules, Barbate, Vejer de la Frontera y la vecina Sierra de Grazalema.
El recorrido, de acceso restringido, nos conduce entre bosques de alcornoques, de quejigos, o de ribera a la cresta desnuda de este monte en la que la vegetación se torna austera, pero hábilmente adaptada a los fuertes vientos, al clima extremo y a la falta de suelos. Desde ella, entre tajos y lajas de difícil acceso, levantan las rapaces sus vuelos.
Desde el 15 de septiembre al 15 de febrero, es necesario consultar previamente con la oficina del parque natural para realizar este sendero, ya que hay actividades de caza mayor en la zona, y por razones de seguridad, es inviable que coincidan estos usos.
La Calzada Romana: naturaleza y cultura
Este sendero conjuga naturaleza y cultura. Un único patrimonio, natural y cultural, que nos permite conocer parte del parque desde Benaocaz a Ubrique, y la historia de su poblamiento. Camino de piedra por el que viajaron hombres e ideas, ejércitos, mercancías e ingenios y que unía la sierra con las costas gaditanas y malagueñas.
Desde el Salto de la Mora, la ciudad romana de Ocuri se asoma al sendero. Rodeado por una formidable muralla y con importantes obras de infraestructuras como depósitos de agua y conducciones, restos de baños públicos (termas), de casas, del foro y del columbario.
La calzada romana era el modelo de camino utilizado por Roma para la vertebración de su Imperio, sentando así las bases de las redes actuales de comunicaciones. Durante la época nazarí, la antigua calzada unía los núcleos de población de Ubrique Alto, la desaparecida Archite y Benaocaz.
Vía verde de la Sierra
La Vía Verde de la Sierra, por cuyo trazado nunca pasó tren alguno, discurre durante 36 kilómetros al pie de las sierras más meridionales de la península ibérica, entre los pueblos gaditanos de Olvera y Puerto Serrano, y entre ambos, el sevillano Coripe.
La ruta comienza en la antigua Estación de Olvera, donde se encuentra el Centro de Interpretación «Vía Verde de la Sierra», aquí podrá conocer, de forma amena e interactiva, todo los aspectos más destacables del entorno, y disfrutar de las sensaciones que transmite la proyección en 4D sobre la Vía.
El paisaje natural que recorre la Vía Verde, entre túneles iluminados y viaductos que se «cuelgan» convirtiéndose en sorprendentes balconadas, está dominado principalmente por la influencia de los ríos Guadalete, Gaudalporcún y, en la parte más alta, Gaudamanil. Pasa por lugares tan espectaculares como el Peñón de Zaframagón, la mayor reserva de buitres de Andalucía y una de las más pobladas de Europa.
Posteriormente, la Vía, llega a otro de los accesos recomendados, la Estación de Coripe, para finalizar en la Estación de Puerto Serrano, que se eleva sobre un cortado presidiendo la vega del Guadalete.
La Vía Verde de la Sierra es un recurso turístico y medioambiental de gran valor, que permite al visitante o viajero asomarse a la riqueza del patrimonio cultural y natural de las zonas por donde transitan, ofreciéndole una amplia oferta de actividades deportivas, educativas, turísticas y medioambientales.
Una vez más, nos encontramos con una antigua vía de ferrocarril abandonada que se ha recuperado, especialmente para recorrer en bicicleta por sus 36 kilómetros en total. El recorrido puede adaptarse y reducirse según se quiera.
Esta vía verde une los pueblos gaditanos de Olvera y Puerto Serrano y tiene más de 30 túneles. De hecho, en Olvera pueden alquilarse las bicicletas para no ir cargado con ellas, aunque también se puede hacer algún tramo a pie.
Salto del Cabrero
Conocido también como 'Camino del Puerto de Don Fernando', el sendero Salto del Cabrero discurre por la antigua vía de comunicación entre las poblaciones de Benaocaz y Grazalema. Se inicia en el pueblo de Benaocaz, al final de la calle Pajaruco, en el límite norte del casco urbano.
La composición caliza de estas sierras origina un paisaje de simas, galerías, cuevas, abrigos, y fallas como el desfiladero del Salto del Cabrero, brecha que parte en dos este cerro con paredes verticales que superan los ochenta metros de altura, dejando un paso entre ellas de no más de cincuenta.
Que éstas sean tierras de cabreros no nos resultará extraño, dada sus características, pero necesitaríamos dejarnos convencer por las leyendas para creer que uno de ellos, portando una cántara de leche para su hijo enfermo o huyendo de un prestamista, lograra dar este salto de una a otra cumbre del desfiladero, casi gemelas y separadas unas decenas de metros.
Desde las cotas más altas se puede observar hacia el suroeste, la Sierra de la Silla y, aún más lejos, el Picacho y el pico del Aljibe, que se encuentran en el vecino Parque Natural Los Alcornocales.
En las múltiples oquedades de sus paredes anidan diferentes aves, destacando las rapaces que veremos sobrevolando el valle y el desfiladero.