San Fernando presenció el simulacro de emergencias como prueba para la puesta en marcha del tranvía

Tranvía Bahía de Cádiz

San Fernando presenció el simulacro de emergencias como prueba para la puesta en marcha del tranvía

Durante una hora y media más de cien operarios de varias administraciones trabajaron en las distintas labores para socorrer a los heridos tras el impacto del TRAMBahía y un coche

Jesús Mejías

San Fernando

09/09/2022
Actualizado a las 19:52h.

San Fernando presenció este viernes el simulacro de emergencia del tren tranvía metropolitano de la Bahía de Cádiz. Una simulación en la que participaban operarios de la Policía Local de San Fernando, efectivos de la Policía Nacional, bomberos, sanitarios y en el que los propios ciudadanos de La Isla fueron partícipes ya que durante el tiempo que duró la ficción, el tráfico estuvo cortado en la zona e incluso los viandantes tenían que cambiar su itinerario para no impedir el trabajo de los distintos operarios.

La delegada territorial de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda de la Junta de Andalucía en Cádiz, Carmen Sánchez, señalaba que el simulacro tenía como objetivo «seguir con el plan de emergencias para el TRAMBahía, para nosotros es un honor que se haga simulacro que forma parte de ese trabajo para poder poner en marcha lo antes posible el funcionamiento del tranvía».

En palabras de la delegada, más de cien personas participaban en el simulacro «en el que la intención es que todas las administraciones trabajen de manera conjunta y si hubiera algún problema en el momento del funcionamiento del TRAMBahía, todo esté perfectamente coordinado. Queremos mostrar la buena coordinación y la buena relación de todas las administraciones para la puesta a punto del tranvía.

El simulacro del tranvía

En torno a las 10.45 horas de la mañana, el tranvía, con pasajeros en su interior, embestía a un vehículo en la glorieta Felipe V en la Avenida Ponce de León esquina con la Calle Real. Unos operarios, con una máquina de humo, hacían una simulación perfecta de lo que puede suceder en el que caso de que el TRAMBahía impacte con un coche.

Rápidamente, una agente de la Policía Local asistía a dos individuos que se encontraban dentro del vehículo en los asientos de piloto y copiloto, siendo el conductor el que presentaba un peor estado. Por otro lado, los trabajadores del tranvía ayudaban y guiaban a los pasajeros, más de treinta personas, a la hora de abandonar los vagones.

Una salida ordenada, rápida y eficaz en la que se pedía en todo momento a los viajeros que mantuvieran la calma y que se quedaran dentro del andén.

Simultáneamente, la agente seguía tomando las constantes vitales a las dos personas que se encontraban dentro del coche y dialogando constantemente con ellos, cuando sonaban las sirenas y aparecían los dos primeros camiones de bomberos y los vehículos sanitarios.

En ese momento se producía una coordinación entre los distintos operarios para poder evacuar a las dos personas que seguían dentro del vehículo, mientras en el interior del tranvía, y para que contemplar todos los posibles escenarios, un viajero en silla de ruedas era ayudado por dos trabajadores del tranvía para abandonar el vagón e incluso se pedía la ayuda de un viajero que anteriormente había abandonado el tranvía para que ayudara con dos heridos graves.

Posteriormente, se llevó a cabo a simulación de la extracción del vehículo de las dos personas que se encontraban dentro del coche, primero el piloto por encontrarse en peor estado de salud, y posteriormente a la mujer que cumplía con la función de copiloto. Por otro lado, los bomberos ayudaban también a la hora de evacuar a los viajeros que estaban heridos dentro del TRAMBahía.

Una vez evacuados las dos personas que se encontraban dentro del coche, un bombero con una manguera simuló como se tendría que actuar a la hora de refrigerar el vehículo e impedir que saliera ardiendo, y posteriormente se simuló el levantamiento del automóvil.

Finalmente, los operarios sanitarios atendían a todos los heridos, eran divididos, según la gravedad en tres colores: verde, amarillo, rojo, estos últimos los más graves, y decidían a los distintos hospitales a los que serían trasladados.

Durante la hora y media que aproximadamente duró el simulacro, y en el que participaron más de cien personas, distintos agentes estuvieron desviando el tráfico en la zona e incluso a los viandantes se les obligó a cambiar su itinerario.