BIENESTAR ANIMAL
La perrera de la Bahía de Cádiz, «un campo de concentración» que vive sus últimos días
El próximo cierre del Centro de Protección Animal gestionado por Athisa deja en el aire muchas incógnitas sobre la situación y el futuro de los perros y gatos abandonados
Este viernes 20 de diciembre era el último día del plazo que los Ayuntamientos de Cádiz, San Fernando, Chiclana y Puerto Real se habían dado para retirar los animales en el Centro de Bienestar Animal de la Bahía de Cádiz ubicado en Chiclana y gestionado por la empresa Athisa. Pero este mismo viernes, en el entorno de la perrera se seguían oyendo ladridos de los perros que aún quedan esperando su destino.
Poniendo en contexto el cómo se ha llegado a esta situación, voluntarios del centro, ex trabajadores y protectoras llevan varios años denunciando una situación crítica para los animales. Cristina, voluntaria, asegura que «siempre ha habido muchísimas deficiencias, problemas con el agua, problemas con la alimentación, problemas con el presupuesto y con los tratamientos veterinarios».
Por ejemplo, este verano se denunció la extrema delgadez de algunos de los perros. Una de las acusaciones es que la empresa no proporcionaba pienso suficiente para la correcta alimentación. Además, «hubo un problema con el agua, que hubo filtraciones de aguas fecales y ha habido muchos perros con diarrea, con bacterias».
Sobre las instalaciones, Cristina cuenta que «están sucias, rotas, oxidadas y son pequeñas». Para ella, las partes implicadas «se han desentendido totalmente y ha sido un maltrato continuo durante años por dejadez». Ella es solo una más de los voluntarios que han colaborado con el centro y que han denunciado las malas condiciones y los incumplimientos de la legalidad vigente sobre bienestar animal.
Aun con unas instalaciones no adecuadas y con la denuncia de una atención deficitaria, la empresa Athisa volvió a ganar el contrato el pasado año por un importe de 1,5 millones de euros en tres años para la gestión de este centro. Eso sí, en el pliego de condiciones también se exigían ciertas medidas para mejorar el bienestar de los perros y gatos residentes, como la incorporación de la figura de un etólogo, la mejora de las instalaciones o la incorporación de 70 nuevos cheniles.
Ha sido durante los últimos seis meses cuando la presión ha ido creciendo con la difusión de imágenes en redes sobre la situación de la perrera. El pasado mes de mayo, los ayuntamientos de Cádiz y San Fernando anunciaron que, de forma conjunta, iban a trabajar para crear un nuevo centro de bienestar animal. En octubre, la Mancomunidad de los municipios de la Bahía anunció el inicio de expediente del secuestro del contrato y su resolución por los continuos incumplimientos, incluyendo la no implementación de las mejoras que exigía el acuerdo.
Así pues, se inició el procedimiento y los cuatro Ayuntamientos decidieron retirar a sus animales recogidos y posteriormente trasladados allí. El primero en dar el paso fue San Fernando, que lo anunció públicamente el pasado 29 de noviembre en un comunicado en el que, además, solicitaba a la Mancomunidad la celeridad en la resolución del contrato con la empresa gestora. Esta recordó que no tiene competencias en la gestión de este servicio y que simplemente ejerce tareas de coordinación y que los municipios implicados habían acordado sacar a los animales antes del viernes 20 de diciembre.
La Plataforma Sin Miedo surge para denunciar todas las irregularidades de la perrera de Athisa el pasado 2023. Están muy pendientes de la situación actual y, en un comunicado, aseguran que «la perrera ha sido, durante siete años, un auténtico campo de concentración para los animales. Sufrieron hambre, enfermedades, hacinamiento y la falta de atención veterinaria adecuada».
Una vez pasado este plazo, queda aproximadamente medio centenar de animales dentro del centro. El Ayuntamiento de Cádiz ha sacado a los que le pertenecen, a excepción de aquellos que se encuentran en trámites de adopción, y los ha realojado en Alhaurín de la Torre. Desde la concejalía de Bienestar Animal en Puerto Real aseguran que «se está trabajando por el bienestar de los animales de Athisa» y que hasta que no esté concretado el asunto del todo no se va a ofrecer más información. Chiclana, por otra parte, indica que la próxima semana se va a proceder a sacar a los perros del centro que fueron recogidos en el municipio y que se van a trasladar a un centro de acogida en Vélez-Málaga. Además, para 2025 tienen previsto licitar un contrato para el servicio de recogida de animales.
Falta de control en el desalojo
Desde la Plataforma Sin Miedo se ha denunciado también la falta de protocolos para el desalojo de los animales. De hecho, la Mancomunidad sacó a licitación un contrato veterinario para mantener el servicio mientras durara el secuestro del contrato. Uno de los puntos es realizar la trazabilidad de los animales desde el centro a instalaciones con núcleo zoológico para animales de compañía. Una circunstancia que, según la plataforma, no se está cumpliendo.
Por ejemplo, esta semana, la asociación Rompiendo Cadenas, a través de una persona particular ha rescatado 20 perros pertenecientes al Ayuntamiento de Chiclana. Desde la concejalía de Bienestar Animal confirman tener conocimiento de este dato, pero desconocer a la persona que realizó los trámites. En sus redes, aseguran querer evitar que los canes vayan a una nueva perrera y querer buscar la mejor atención posible para ellos. No es la única asociación que se ha implicado en los desalojos, pero sí un llamativo caso de los más recientes.
Nuevos interrogantes
Una vez desalojado el centro, se abren múltiples interrogantes como es, precisamente, la recogida de animales por parte de los municipios. Un servicio que, hasta el momento, estaba bajo el control de Athisa. Desde Chiclana han confirmado que la intención es sacar este servicio a licitación durante el próximo año. San Fernando, por ejemplo, a través de sus redes sociales busca hogar a los animales recogidos, un protocolo que para María, de la Plataforma Sin Miedo, podría no ajustarse a la legalidad porque «las adopciones se hacen a través del Ayuntamiento en un centro de protección animal y se tienen que cumplir diez días sin que nadie reclame a ese animal» para poder gestionar la adopción.
Por otra parte, desde que el pasado mes de mayo Cádiz y San Fernando anunciaran su proyecto conjunto o de que Puerto Real se ofreciera a ceder un terreno en el pago de Malas Noches apto para un nuevo centro que dé servicio a la Bahía, no se han hecho públicos los posibles avances a este respecto.
Por tanto, falta saber cómo cada municipio va a gestionar a partir de ahora la recogida, mantenimiento y adopción de los animales abandonados, a la espera de que el ansiado nuevo centro dé el mejor servicio y en las mejores condiciones.
