Sector inmobiliario

La patronal gaditana de la Construcción reclama planes de formación similares a los que recibe la Industria

Estos empresarios demandan también plantillas cualificadas para afrontar los nuevos retos

Reconocen que Cádiz necesita mano de obra formada y estiman que hacen falta unos 13.000 trabajadores

El sector generó empleo en 2024 en la provincia y logró sacar del paro a casi un millar de gaditanos

La construcción también quiere plantillas formadas y cualificadas para construir un sector más sólido y competitivo LA VOZ

En julio del pasado año, en pleno verano, la Junta de Andalucía, la Federación de Empresarios del Metal de Cádiz (Femca) y el Clúster Naval de Cádiz unían sus fuerzas para la implantación de la formación en el sector del Metal. La carga de trabajo que se avecina durante los próximos años en la industria gaditana es amplia y se necesita personal cualificado para afrontarla. De esta forma, volvía la formación específica y profesional a Andalucía tras diez años de ausencia por casos de corrupción durante la etapa de Gobierno socialista. Los casos de fraude en el desarrollo de estos cursos llenaron los juzgados y hubo que paralizar su desarrollo hasta nueva orden. Una década después la formación profesional específica vuelve a Cádiz y lo hace de la mano del sector naval.

El plan diseñado para la industria gaditana tiene un carácter plurianual, destinado a formar a 8.500 alumnos. Estos cursos comienzan, precisamente, en este primer trimestre de 2025. El objetivo de este proyecto no es otro que formar a los futuros profesionales del Metal en disciplinas industriales vinculadas con el sector naval y el offshore con el fin de incorporarse a las empresas tractoras y a la industria auxiliar. La patronal estima que la industria gaditana puede generar en los próximos años más de 7.000 empleos y, por ello, es clave la formación especializada de esta mano de obra. El plan está dotado con 2,3 millones de euros y está dirigido a la población más joven, a parados y a estudiantes de FP.

La pregunta de los constructores

¿Por qué este plan solo se aplica al sector naval? ¿Por qué no se extiende a la construcción? Estas son algunas de las preguntas que se hace la Federación de Empresarios de la Construcción de Cádiz, que ven como el ladrillo se queda atrás en materia formativa y no coge al tren de los cursos de formación de la Junta. El secretario general de la patronal gaditana de la Construcción, Jorge Fernández-Portillo, señala que esta situación obedece a un error político, es decir, «las administraciones no consideran a la construcción como un sector estratégico en la provincia de Cádiz, mientras que sí lo hacen con la industria». El tirón de Navantia, Dragados Offshore o Airbus, grandes empresas tractoras, tienen mucho que ver con esta política.

La construcción necesita mano de obra cualificada, entre otras razones, argumentan los empresarios, por que el Gobierno, por primera vez, ha hecho un guiñó en favor de la vivienda y ha planteado alternativas para poner en el mercado nuevas promociones a precios muy asequibles. Es probable que estemos en la antesala de un nuevo ciclo inmobiliario si se cumplen las promesas. Ante esta nueva situación, la patronal gaditana de la Construcción quiere el mismo trato que recibe el sector industrial en materia formativa.

Cabe recordar que el Construcción en Cádiz durante 2024 ha generado empleo. Más que la Industria. De hecho, durante los doce meses del pasado año hubo reducción de paro en este sector, salvo en agosto y en diciembre, que pinchó en hueso. La Construcción arrancó 2024 con una bolsa de parados en la provincia de 12.205 personas y cerró el año con una nómina de 11.276 desempleados, lo que significa que ha logrado generar casi un millar de empleos.

 

Las expectativas que se ciernen sobre el mercado inmobiliario presagian un nuevo ciclo para el ladrillo que obliga a las empresas a estar preparadas

 

 

No obstante, falta mano de obra en el sector de la construcción. Solo Andalucía necesita 120.000 trabajadores en la construcción con perfiles como jefes de obra, ingenieros de camino o encargados. Esta cifra la daba en Sevilla el decano del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos (Ciccp), Juan Manuel Medina, el pasado año. Una de las principales preocupaciones del sector es la falta de relevo generacional, ya que en la comunidad autónoma solo el 9% de los trabajadores del sector tiene menos de 30 años, mientras que en el 2008, justo antes de la crisis económica, uno de cada cuatro empleados tenían menos de 30 años. En 2008 el 17% de los trabajadores en la construcción en Andalucía tenían más de 50 años, y en 2024 la cifra había crecido hasta el 35%.

Crecimiento del ladrillo

En Andalucía hacen falta 120.000 trabajadores en el sector de la construcción, pero hay 112.000 demandantes de empleo registrados en este sector, pero ni las vacantes se cubren y la falta de trabajadores en la plantilla está obstaculizando el crecimiento del sector.

Los expertos señalan que la falta de profesionales se debe a que a raíz de la grave crisis económica del año 2008 y la pandemia del COVID-19 en 2020, el sector de la Construcción ha dejado de ser un atractivo para los jóvenes, que muestran poco interés en carreras de la construcción y prefieren empleos percibidos como más estables, menos físicos y con mejores condiciones laborales.

La situación en la provincia de Cádiz es similar a la de Andalucía y España, hacen falta trabajadores prácticamente en todos los oficios y especialidades, preocupa el relevo generacional a pesar de que los sueldos del sector se encuentren por encima del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) y por ello que la patronal pretende atraer a los jóvenes para que se interesen en este campo laboral.

Jorge Fernández-Portillo, Secretario General de la Federación de Empresarios de la Construcción de la Provincia de Cádiz afirma que «es cierto que faltan 120.000 trabajadores», pero «lo primero que hay que hacer es matizar», ya que «harán falta 120.000 trabajadores en Andalucía en los próximos años».

«Es difícil calcular en cuantos años, pero como mínimo todo lo que termine prolongándose la ejecución de los fondos europeos, que teóricamente a finales de 2026 hay muchas partidas que tienen que estar ejecutadas, pero que se prolongará como mínimo hasta el año 2030, por lo que esa estimación de falta de trabajadores en Andalucía de 120.000 trabajadores, no es que hagan falta ahora mismo 120.000 trabajadores, sino que en los próximos años harán falta hasta 120.000», afirma.

En estos momentos en Andalucía hay «unas 235.000 personas trabajando en el sector de la construcción, por lo que decir que faltan 120.000 es decir que falta casi un 50%, que tampoco es muy cierto en este momento».

Las estimaciones de la patronal son que «harán falta unos 700.000 trabajadores hasta el año 2030-2035», mientras que «en Andalucía que representamos un 17% aproximadamente de la población activa del sector entendemos que esa es la cifra, esos 120.000 trabajadores».

En el caso de la provincia de Cádiz, «de los 235.000 trabajadores de Andalucía, Cádiz está en un tercer lugar, entre los 26.000 trabajadores aproximadamente», por lo que en Cádiz harían falta aproximadamente 13.280 trabajadores hasta el año 2030. «Cádiz está ahora mismo entre los 25.000 y los 30.000 trabajadores», apunta.

Una de las claves a la situación y mejora del sector la dio el pasado diciembre Emilio Corbacho, presidente de Federación Andaluza de Empresarios de la Construcción (FAEC), en la inauguración de la Feria de la Construcción en el recinto ferial de Jerez. Corbacho explicó entonces algunos de los objetivos de Expoconstruye, como demostrar la unión del sector, garantizar que este tiene futuro, defender la necesidad de la colaboración «de todos» y la apuesta sin marcha atrás por transformar el sector hacia la industrialización, donde se unen la innovación, la digitalización y la sostenibilidad. «Abordamos estas cuatro temáticas principales: innovación, que no es otra cosa que mejorar, introducir cambios en elementos existentes; digitalización, que significa que los datos estén más estructurados, más organizados, más explotables; sostenibilidad, o lo que es lo mismo no agotar los recursos, que el bien común al que el ciudadano y las administraciones están abocados no se acaben en esta generación, que pensemos en las futuras; e industrialización, en lo que desemboca todo, que es el paso de lo artesanal a lo industrial», destacó.

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