Provincia de cádiz
«Sin una pareja es muy difícil independizarte»
Según el informe de EsadeEcPol y FNF el 48,5% de los jóvenes (18-34 años) encuestados afirman que tienen problemas para ahorrar a largo plazo
Uno de los principales problemas de los jóvenes (18-34 años) son los problemas a la hora de acceder a un trabajo con unas condiciones dignas, y por otro lado el acceso a la vivienda. Esta afirmación la refrenda el informe 'La juventud mediterránea frente a los desafíos de la crisis permanente' de EsadeEcPol y FNF que afirma que el 48,5% de los jóvenes encuestados afirman que tienen problemas para ahorrar a largo plazo.
Para el 21,4% de los jóvenes su capacidad de ahorro a largo plazo es mala, mientras que para el 27,4% es muy mala. Tan solo el 7,4% de los jóvenes considera que tiene una situación económica lo bastante positiva para poder generar unos ingresos constantes a largo plazo.
Además, a la hora de tener capacidad para independizarse, el 36,4% reconoce que no puede afrontarlo por falta de ahorros propios, mientras que para el 39,4% el problema es que no tiene ingresos propios.
No obstante, las expectativas para el futuro son positivas en los jóvenes, ya que el 23,9% afirma que en los próximos 20 años su economía irá mejorando progresivamente.
El principal problema de los jóvenes a la hora de ahorrar, con unos sueldos en muchos casos es el Salario Mínimo Interpresional, es afrontar un plan de vida a medio-largo plazo, con previsiones de comprar una vivienda, un coche, y por otro lado, intentar mantener la vida social, seguir haciendo planes con su pareja, amigos o familia.
«Es una situación frustrante»
Carlos es natural de San Fernando y teletrabaja en una empresa de marketing digital de Sevilla. «Tengo que ir de manera presencial un par de veces al mes», por lo que «voy y vuelvo en el mismo día».
A sus 28 años vive en casa de sus padres. «Yo aquí no estoy mal, pero si es cierto que uno va cumpliendo años y va queriendo tener su propia independencia», pero «ahora mismo es imposible».
«Es una situación frustrante», reconoce, ya que «yo gano unos 1.100 euros netos al mes aproximadamente y claro, mi intención es comprarme una casa aquí en San Fernando», por lo que «irme de alquiler ahora mismo es inviable», porque «el dinero que quiero ahorrar para la casa se me iría en el alquiler».
Su estrategia es bastante sencilla, «guardo 500 euros al mes aproximadamente en otra cuenta para mis ahorros», con lo que «quiero ahorrar unos ocho mil euros aproximadamente para comenzar a buscar casa», aunque «sin prisa».
El «problema» es que «no llego, todos los meses tengo que coger algo de la otra cuenta de ahorros». Por ejemplo, «en octubre tuve que pagar el seguro del coche que fueron 300 euros, pasó la ITV y le tuve que hacer un pequeño arreglo», así que «la mitad del sueldo se lo llevó el coche», y si este mes es el coche, el que viene será otra así, y así siempre.
«Todos los meses hay algo, es raro el mes en el que no tenga que afrontar algún imprevisto que no supere los 150-200 euros», destaca.
Sus amigos «están casi todos en la misma situación». Afirma que «sin una pareja es muy difícil independizarte», porque «con dos sueldos la cosa cambia, ya si alguno tiene un gasto extra, hay otra nómina de la que tirar».
«Yo no tengo una vida con muchos lujos, no voy todos los fines de semana a cenar fuera, ni me pego cinco viajes al año, considero que tengo una vida normal como la tiene mi vecino o quien sea, una vida normal, pero a mí personalmente me cuesta mucho ahorrar», sentencia.
«Con trabajo y esfuerzo, se puede»
Situación opuesta es en la que se encuentra Daniel, natural también de San Fernando. Graduado en Ingeniería Química por la Universidad de Cádiz. A sus 32 años «me compré mi propia casa hace ya cuatro años», y «lo que tengo, me lo he ganado yo solo».
«Yo tuve mucha suerte», reconoce, porque «nada más terminar la carrera empecé trabajando en Airbus», y «posteriormente me pude enganchar a mi actual empresa», que se encuentra en El Puerto.
Considera que «tengo un sueldo que creo que está por encima de la media habitual a mi edad», y «eso me ha permitido comprarme una casa», pero «sé que todo el mundo no está como yo».
«Pago 450 euros de hipoteca», y afirma que «voy bien, no es que viva sin preocuparme del dinero y malgastando, pero puedo llevar una vida que me gusta», aunque «siempre podría vivir mejor», bromea.
Entre «la hipoteca y los gastos de comida, facturas...», Fernando paga mensualmente «unos 720 euros al mes», a ese gasto «añade unos 150-200 euros al mes en gasolina» y «150 euros de la letra del coche». «Tengo más de mil euros de gastos», pero «después en vez de irme a cenar los viernes por la noche, me como algo en casa y me voy luego y me bebo un par de cervezas», y «en vez de pagar cuarenta o cincuenta euros por un gimnasio, como a mí me gusta correr, solo necesito unas zapatillas». En definitiva, «con trabajo y esfuerzo, se puede».