Borrasca Konrad
Los vecinos de El Portal se preparan para «lo peor» tras las inundaciones en Jerez
Miguel protege la puerta de su casa ante una posible inundación por el desbordamiento del río Guadalete
Pepi, vecina desalojada en Jerez: «Siempre tienes ese miedo a dejar tu casa sola porque te pueden robar»
Desalojo preventivo de 200 personas y sin clase en dos colegios de Jerez por la crecida del Guadalete
Los vecinos de El Portal se preparan para «lo peor». Esta pedanía de Jerez vive unas horas intensas por desbordamiento del río Guadalete que podría anegar sus casas. Miguel, uno de los afectados, prepara su casa ante la llegada del agua. «La última vez el agua alcanzó los 62 centímetros», relata. Lo tiene todo preparado: «He colgado las bicicletas y lo he subido todo».
Como Miguel, son muchos los vecinos de El Portal y de otras pedanías de Jerez que afrontan momentos complicados por el desbordamiento del río Guadalete. «A las 15.00 horas es la pleamar y nos han dicho que va a ser lo peor».
En la venta Las Angulas, su dueño se muestra contrariado por los desalojos. «Cada vez que llueve me cierran y a ver quién me paga a mí las cuentas», sostiene, y agrega que «yo entiendo que hay que tener cuidado con todo lo que ha pasado en Valencia, pero ahora cada vez que llueve ponen una alerta naranja».
Acogidos por Cáritas
En El Portal hay un albergue junto al colegio público Virgen del Mar en el que han pasado la noche catorce personas. Pepi Romero, delegada de alcaldía de El Portal, los atiende y les presta su ayuda. «Ayer a las once de la noche nos dijeron ya que probablemente iban a tener que desalojar a algunas familias».
A las 02.00 horas de la madrugada «llegaron dos familias de Las Pachecas que estaban muy nerviosos», y «a las cuatro y pico de la mañana fue cuando nos dijeron que tenían que desalojar a algunos vecinos de El Portal».
Los vecinos «han ido poniendo las cosas en alto en los últimos días porque sabemos que en cualquier momento nos podían llamar para decirnos que nos teníamos que ir de nuestras casas».
El albergue tiene 28 literas y cuenta con dos camas grandes. «Desde la Junta de Andalucía nos han dicho que pueden traer cincuenta camas plegables, así que capacidad tenemos de sobra». Además, tanto el Ayuntamiento como Junta «han ido trayendo comida».
Al albergue ha ido acercándose una patrulla de la Policía Nacional constantemente. «Tened cuidado», comenta uno de los agentes. «Comed lo que podáis, bebed lo que podáis y si vais a coger el coche, tened cuidado con los charcos, que muchas veces no sabemos la profundidad que pueden tener».