JEREZ
Reabre sus puertas una de las cocinas más famosas de Jerez tras casi una década cerrada
Tras años de abandono y deterioro, el emblemático edificio del Restaurante El Bosque, ubicado en el Parque González Hontoria, está a punto de escribir un nuevo capítulo en su historia
La Junta de Gobierno Local, bajo la dirección de la alcaldesa María José García-Pelayo, ha aprobado la tan esperada licencia de obras para la rehabilitación de este espacio, marcando así el inicio de una emocionante nueva era para uno de los lugares más queridos de Jerez.
La adjudicación de la gestión de este icónico establecimiento a Mantúa Gastronómica, una empresa de reconocido prestigio liderada por el chef jerezano Israel Ramos, promete un futuro brillante lleno de sabor y tradición. La alcaldesa García-Pelayo ha expresado su entusiasmo por este paso significativo, destacando el impacto positivo que tendrá en la revitalización del Parque González Hontoria y su entorno.
«La reapertura de este establecimiento señero de la ciudad será un verdadero hito», afirmó García-Pelayo. «Estamos convencidos de que dará nueva vida al parque y contribuirá a revitalizar toda esta zona».
El reconocimiento hacia Israel Ramos por su compromiso con Jerez y su contribución a la escena gastronómica local ha sido evidente en las palabras de la alcaldesa. «Agradecemos a Israel Ramos por expandir su red de establecimientos en la ciudad, fortaleciendo así la proyección de Jerez como referente gastronómico», señaló García-Pelayo. «Estamos seguros de que este restaurante será un gran éxito y se convertirá en uno de los principales atractivos gastronómicos de la provincia y la región».
La intervención planificada abarca una serie de obras destinadas a poner en funcionamiento este emblemático restaurante. Entre las tareas programadas se incluyen labores de reparación y la eliminación de patologías presentes en distintas áreas del edificio, todo ello con el objetivo de preservar su esencia y encanto originales.
Con una parcela de 2.787 metros cuadrados y un edificio de dos plantas con una superficie de 933 metros cuadrados, la intervención respetará la estructura original del lugar, asegurando que su legado perdure en el tiempo.
La reapertura del Restaurante El Bosque no solo representa un acontecimiento para los amantes de la gastronomía jerezana, sino también un símbolo de la resiliencia y el compromiso de la comunidad local con la preservación de su patrimonio. En unos meses, este icónico establecimiento volverá a abrir sus puertas, listo para deleitar a comensales con su exquisita oferta culinaria y escribir un nuevo capítulo en la historia de Jerez.
Historia del restaurante
En la década de los cincuenta, mientras Álvaro Domecq lideraba como alcalde la ciudad de Jerez, surgió la necesidad de un espacio que pudiera recibir a distinguidas visitas y autoridades con la elegancia y el buen gusto que merecían. Así nació la idea de construir un edificio en la zona del Parque González Hontoria, próximo a la avenida principal, dando origen al legendario Restaurante El Bosque.
Bajo la batuta culinaria del renombrado chef vasco José Mari Garastazu, El Bosque pronto se convirtió en un referente gastronómico en toda la provincia. Garastazu no solo llevó el prestigio de la cocina vasca a tierras andaluzas, sino que también introdujo un elemento novedoso al traer a las primeras camareras desde el País Vasco, lo que causó sensación en la época.
A finales de los años sesenta, el testigo de la excelencia gastronómica fue recogido por José Antonio Romero-Valdespino y la sociedad Valdehermosa, quienes mantuvieron en alto el estándar de calidad hasta 1977, cuando los hermanos Alfonso y Antonio Rodríguez asumieron la gestión del lugar. Con la llegada de Alfonso Catering, El Bosque vivió una prolongada época dorada.
Los muros de El Bosque fueron testigos mudos de innumerables eventos sociales, conspiraciones políticas y cierres de tratos multimillonarios. Era el lugar de encuentro obligado para personalidades y rostros conocidos, aunque la discreción y prudencia de los hermanos Rodríguez impidieron que se divulgaran todos los nombres de sus distinguidos comensales.
Entre los selectos clientes que disfrutaron de la exquisita cocina de El Bosque se encuentran los entonces Condes de Barcelona, abuelos del actual rey Felipe VI, así como figuras de la talla de Julio Iglesias, Manuel Alejandro y la inolvidable Duquesa de Alba, entre otros.
A lo largo de los años, El Bosque ha sabido mantenerse como un símbolo de elegancia y buen gusto en la gastronomía jerezana. Su legado perdura no solo en sus platillos, sino también en las historias que sus paredes guardan celosamente, siendo un testigo vivo de la historia y la cultura de la región. Sin duda, una visita a El Bosque es más que una experiencia culinaria, es sumergirse en un pedazo de la historia de Jerez. En 2017, cerró sus puertas, pero próximamente volverá seguramente a convertirse en un rincón gastronómico de interés en la ciudad.
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