Furtivos
La Guardia Civil interviene en Sanlúcar 134 kilos de camarones «sin garantías ni trazabilidad»
La proximidad de las ferias aumenta la demanda de este producto fundamental para hacer «tortillita de camarones»
La Guardia Civil de Cádiz, concretamente el SEPRONA de Jerez, ha intervenido 134 kilos de camarones en Sanlúcar de Barrameda, de origen desconocido, dispuestos para su distribución en todo el territorio nacional.
El aumento de la demanda de este producto con la proximidad de las ferias, incita a estas empresas a adquirir los camarones procedentes del furtiveo. La seguridad alimentaria del consumidor final se convierte en prioridad para la Guardia Civil, intensificando las inspecciones en meses de mayor consumo de estos alimentos y otros productos que pudieran intoxicar y perjudicar la salud del consumidor. Se han interpuesto dos infracciones contra la seguridad alimentaria.
Los hechos ocurrieron el pasado miércoles día 2 en la localidad de Sanlúcar de Barrameda, durante la intensificación de actuaciones contra la seguridad alimentaria de los consumidores.
Los agentes del SEPRONA de Jerez de la Frontera realizaron una inspección a empresas de distribución de alimentos, localizando en una de ellas las cantidades de 134 kilos de camarones dispuestos para su venta en y elaboración del producto final, como la famosa «tortillita de camarones» tan demandada, cada vez más, en numerosos establecimientos de todo el territorio nacional y en especial, en la provincia de Cádiz.
Este producto se intervino debido a que carecía plenamente de cualquier tipo de etiquetado, albarán o factura y origen desconocido por lo que no se lleva control alguno en la trazabilidad de este alimento que llega al consumidor final.
El aumento de la demanda de este producto en la proximidad de las ferias, incita a las empresas o industrias a adquirir los camarones procedentes del furtiveo sin control ninguno.
Por estos hechos, los agentes del SEPRONA de la Guardia Civil de Cádiz intensifican en estos meses, más si cabe, la lucha contra el fraude alimentario que puedan poner en peligro la salud de las personas.
Tras la intervención de alimento, puesto a disposición de la Delegación Territorial de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, se han interpuesto dos infracciones contra la seguridad alimentaria.
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