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Flow 112 un nuevo concepto de ir a la moda
Mewy Fernández: Periodista y empresaria creadora de Flow 112
Mewy Fernández es una empresaria jerezana amante de la moda, que pone a disposición de sus clientes una cuidada y exclusiva selección de ropa y complementos que son tendencias en el mercado. Cuando terminó el colegio decidió enfocarse profesionalmente en algo que siempre le había gustado, el periodismo. En este campo trabajó durante algunos años, lo hizo para diferentes medios: nacionales, autonómicos y locales de televisión, radio o prensa, aunque sus preferidos siempre han sido en los que podía hablar, ya que a la joven lo que no le faltan son las palabras. «Recuerdo que en mis comienzos estaba en la radio, algo que me encantaba. Entraba a las 4 de la mañana y salía a las 12 del medio día, lo hacía de forma muy vocacional», nos cuenta nuestra protagonista.
La periodista es madre de tres hijos: Carmen, Ignacio y Lola que nació hace algunos meses. A día de hoy, su prioridad es su familia y así nos lo ha insistido en reiteradas ocasiones. «Intento ser buena madre y buena esposa», dice. Mewy que es una persona con mucho carisma es muy amiga de sus amigas, y aunque no las puede ver todo lo que quisiera disfruta al máximo de los pocos ratos que sus obligaciones tanto personales como profesionales le deja con ellas. Asegura que le gusta relativizar los problemas para darle la importancia necesaria a las cosas que valen la pena como por ejemplo darles el cariño que merecen a sus seres queridos o intentar ser buena persona. Otra de las virtudes que posee es su facilidad para empatizar con la gente. «Soy una entusiasta de las personas, disfruto escuchando, pero sobre todo aprendiendo de cada una de ellas», ha añadido.
Cuando la jerezana volvió a su tierra, se casó y tuvo a sus hijos se dio cuenta que tenía que cambiar el rumbo profesional de su vida ya que necesitaba más tiempo para su familia. Aunque el periodismo fuese su pasión entendió que el tiempo que le dedicaba era demasiado para compatibilizarlo con su nueva prioridad. Entonces, se puso a pensar que como podía hacer para dedicarse profesionalmente a algo en lo que pudiese potenciar todas sus habilidades. Tras realizar un máster de Estilismo de moda, por fin, con todas esas premisas de comunicación, moda, muchas ganas y pasión, decidió lanzarse. Ahí fue cuando dio con el concepto de Flow 112, el proyecto que emprendió hace dos años, por el que vive entregada y que le hace feliz. «Este nace de las ganas de sentirme realizada conmigo misma y es por eso que decidí montarme algo por mi cuenta que fuese una combinación de trabajo y mi afición por la ropa», explica.
Flow 112 es en palabras de su creadora un proyecto de moda en constante evolución, no solamente una tienda, nace por y para las personas. «Un universo exclusivo donde cabemos todos. Y con el férreo convencimiento de que la calidad, es más importante que la cantidad. Somos de los que pensamos que generalmente de los palos se aprende más, que de los halagos. Somos de los que hacemos de la ilusión, nuestro aliado. Gracias a este proyecto la palabra importante por fin cobra significado y lo insignificante no pasa desapercibido. Porque hemos comprendido, que la unión hace la fuerza y el yo a secas, no vale nada. Porque el trabajo en equipo, el tesón con ganas y gran dosis de felicidad, crean la combinación de una fórmula exacta perfecta. Para nosotros, la moda es lenta y es artesana. Es una sonrisa perenne, es belleza y es magia. ¡Por eso ya estamos aquí, para comunicarte todo lo que necesitas saber sobre ella! Porque con flow la vida fluye y si fluye… ¡has ganado!», no duda en afirmar.
La empresaria asegura que Jerez necesitaba algo así y que no lo había. «Pienso que es algo que falta en muchas ciudades y podría haberlo desarrollado en otro lugar, pero qué mejor manera de crearlo que en mi tierra y no dejar de aprender de estos dos mundos que me apasionan como son la moda o el periodismo desde donde está mi hogar, mi gente, mi familia y el sitio donde soy feliz, porque este rincón de España es un lugar maravilloso», dice con rotundidad. La jerezana es consciente del riesgo que asumió al decidir emprender algo diferente, sobre todo porque al poco de abrir llegó la pandemia. «Creo que todo lo que se empieza desde cero conlleva un peligro que hay que asumir y afrontarlo con mucha pasión, cabeza, corazón y ganas para que salga adelante poco a poco. Las prisas no son buenas consejeras y nosotros vamos pasito a pasito forjando este proyecto. Aunque antes de lanzarse hay que tener los pasos muy claros, las ideas muy bien pensadas y estructuradas, pero con la actitud mencionada anteriormente todo en esta vida debería ser posible. Por supuesto que no es nada fácil, hay que echarle muchas horas, mucho trabajo, pero como todo lo que se trabaja, al final ves la recompensa».
Cuenta la empresaria que la parte más difícil de su trabajo es compatibilizar el desarrollo del negocio con sus tres hijos. «Ahora es cuando más valoro a las mujeres emprendedoras que tienen sus familias porque llega a ser muy complicado y agotador. Soy una persona que antepongo la vida personal a la profesional, valoro mucho el compartir tiempo con mis niños y seguramente esa sea una de las razones por las que quiero ir poco a poco, pero lo que hago está hecho con muchas ganas, muchas horas y mucho cariño. Aunque como para todas las madres los hijos son lo primero», insiste.
La también periodista es una enamorada confesa de su tierra, de su Jerez, pero por supuesto de su provincia. De ella dice que es luz, que es positividad, que es buen rollo, que es alegría, que es playa, que es campo, que es arte… «En definitiva, es tener buen flow». Cádiz para ella son sus recuerdos de verano donde los pasaba entre el campo y la playa portuense de El Manantial. «Pasábamos una temporada en la finca de mis abuelos maternos y otra en El Puerto con la familia paterna. Recuerdo con mucho cariño esas jornadas interminables que compartíamos con mis primos. Ahora que soy madre y trabajo los veranos se ven de otra perspectiva», dice entre risas. Aunque asegura que intenta darles a sus hijos los mismos buenos momentos que tuvo ella de su infancia y juventud veraniega.
A Mewy le encantan los pueblos blancos de la provincia, no solo por la estampa que dejan sino por sus habitantes y lo que le transmiten cuando va a cualquiera de ellos. Se queda con uno por encima del resto, Jimena de la Frontera. Aunque sin duda lo que más le gusta de su rincón andaluz es la feria de Jerez, dice que eso es algo que cualquier visitante a Cádiz debería intentar conocer.
Mewy que es una mente inquieta y creativa nos ha adelantado que pronto van a lanzar una serie de podcast donde hablarán de diversos temas de actualidad, no solo de moda. «Habrá invitados muy interesantes que aportarán mucho con sus experiencias. Hablaremos de emprendimiento, de empoderamiento… creo que es una oportunidad para conectar con la gente y enriquecernos».
Para conocer más sobre este proyecto que tanta ilusión lleva a cuestas podéis seguirlo en la cuenta de Instagram: @flow.112
