INDUSTRIA
Expectación en los astilleros gaditanos ante el inicio de la obra del BAM y del patrullero de Marruecos
El Comité Intercentros de la compañía está citado el martes en Madrid y se prevé que la reunión sirva para definir la futura carga de trabajo
Todo apunta que el corte de chapa en Puerto Real y San Fernando se lleve a cabo antes de la campaña electoral
Los astilleros gaditanos están a la espera de que la dirección de Navantia anuncie la fecha de inicio de las obras de los dos proyectos navales más inmediatos que pesan sobre las plantas de la Bahía de Cádiz. Se trata, por un lado, de la construcción del BAM-IS de apoyo a submarinos, que se desarrollará en la factoría de Puerto Real, y, por otro, de la ejecución de un patrullero para la marina de Marruecos, que se llevará a cabo en las instalaciones de San Fernando.
Todo apunta a que el presidente de la compañía, Ricardo Domínguez, comunicará de manera oficial el próximo martes la carga de trabajo prevista para las seis factorías de Navantia en España (Fene, Ferrol, Cartagena, Cádiz, Puerto Real y San Fernando). La expectación en los astilleros gaditanos es máxima para este segundo semestre del año. La dirección de Navantia mantendrá la semana que viene una reunión con el Comité Intercentros y no se descarta que el encuentro sirva para presentar el plan Horizonte 5.0, que recoge las directrices de futuro de Navantia para los próximos años. Donínguez se ha reunido con los representantes de los trabajadores en dos ocasiones entre febrero y abril, para exponer de manera genérica las características generales del plan, pero sin entrar en detalles sobre su calendario de actuación. Parece que a la tercera va la vencida y la dirección de la compañía desgranará uno a uno los acuerdos firmados y su compromiso con los clientes.
Al margen de la campaña electoral
Así, por lo que respecta a Puerto Real, se da por hecho que el corte de chapa del BAM se llevará a cabo antes de las elecciones generales del 23 de julio. El presidente de la compañía anunció el pasado enero en una conferencia en el astillero de San Fernando que la previsión inicial para el arranque de la obra del BAM era mayo, sin embargo, esta fecha no se ha cumplido y se prevé que junio sea el pistoletazo de salida de esta ansiado proyecto naval de la Armada Española.
La construcción del Buque de Acción Marítima de Intervención Subacuática (BAM-IS) supondrá más de 1,3 millones de horas de trabajo en la Bahía de Cádiz. El plazo de entrega previsto es de 42 meses desde la firma de la orden de ejecución. La obra generará un valor añadido directo e indirecto para la economía de aproximadamente 54 millones de euros anuales y una demanda agregada de 159 millones de euros anuales. En cuanto a los puestos de trabajo, serán 1.115 empleos, incluyendo empleo directo en Navantia (160), de industria colaboradora (290) y empleo inducido (665), correspondiente a los suministradores y actividad económica en torno a la construcción. Al igual que todo proyecto naval, el proyecto tendrá un importante efecto tractor de actividad industrial.
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La firma de la orden de ejecución fue autorizada en octubre de 2021 por un importe de 166,46 millones de euros. El contrato comprende tanto la construcción del buque como la adquisición e integración de los equipos de intervención subacuática. El BAM-IS sustituirá al actual buque de Salvamento y Rescate de la Armada 'Neptuno', que está llegando al final de su vida operativa y que actualmente se encarga de las operaciones más complejas de intervención subacuática.
El Comité Intercentros confía en que durante la reunión del próximo martes la dirección de Navantia profundice en el avance del plan que transmitió el pasado abril. De hecho, se espera que durante la reunión se aclare algo más sobre la propuesta de la Armada de encargar dos nuevos BAM.
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La firma del contrato de estos dos nuevos buques, las unidades 7 y 8, se prevé para 2024 y el inicio de su obra, para 2025
No son los únicos barcos que plantea la Armada y que constan en el Plan Horizonte 5.0 de Navantia. En el mismo cronograma de trabajo aparece la construcción de dos buques Hidrográficos costeros y de uno Hidrográfico Oceánico, cuyo contrato aún no se ha firmado. De hecho, el Ministerio de Defensa ya anunció un plan en junio de 2021 para la adquisición de dos nuevas unidades que sustituyan a las actuales 'Malaespina' y 'Tofiño', ambas con sede en San Fernando.
También eólica-marina
El otro contrato que abordará el astillero de Puerto Real en los próximos meses es offshore. Así, Ocean Winds, una empresa española dedicada a energía eólica marina creada por EDP Renewables (EDPR) y Engie, confirmó el pasado año la construcción de dos cimentaciones tipo jacket y pilotes asociados para las subestaciones de dos parques eólicos marinos en Francia: îles d'Yeu et Noirmoutier y Dieppe Le Tréport, con una capacidad de generación de 496 MW cada uno y entrada en operación a partir de 2025. Las jackets se construirán en el astillero de Navantia en Puerto Real, donde generarán aproximadamente 380.000 horas de trabajo .Ambas estructuras se entregarán en 2024 y 2025.
El otro acuerdo que ya está sellado compete al astillero de San Fernando y se refiere al patrullero para la marina de Marruecos. También se prevé que el corte de chapa que marca el inicio de su obra sea inminente. Esta obra toma el relevo de las cinco corbetas saudíes que se han construido en la planta isleña desde 2019 y cuyas dos últimas unidades ya se encuentran en la recta final para su entrega. De hecho, la cuarta se envió a Arabia el pasado mayo para su remate final y la quinta lo hará en agosto.
La obra del barco marroquí viene a cubrir de manera temporal el espacio de tiempo que necesitará Navantia para poner en marcha el nuevo contrato firmado el pasado noviembre con Arabia Saudí para la construcción de otros cinco barcos. Este encargo, a diferencia de las corbetas, se llevará a cabo por transferencia tecnológica, es decir, la empresa española construirá en la Bahía de Cádiz una parte de los buques, mientras que la otra será construida en un astillero saudí bajo la dirección técnica de Navantia. De hecho, ambos países están cerrando ahora los últimos flecos de este acuerdo naval.
En cuanto a la obra del patrullero de Marruecos se sabe que el barco elegido es del modelo Avante 1400, pero más desarrollado que las cuatro unidades vendidas a Venezuela en 2012. Se trata de un moderno buque diseñado por Navantia, con una longitud de 89 metros y 13,3 de eslora, con una dotación de 46 personas y capacidad de albergar a otras 12, según el dossier oficial de los astilleros. Además cuenta con modernos sensores y radares, contramedidas electrónicas, un cañón de 76 milímetros y sistema de lanzamiento de misiles, así como un puente para llevar un helicóptero. Su fabricación supondrá un millón de horas de trabajo para los astilleros de la bahía de Cádiz y cerca de 250 empleos durante los próximos tres años y medio.
El Comité Intercentros preguntará también por las negociaciones con Australia y Angola ante la firma de posibles encargos.
El anterior plan estratégico, el 'Astillero 4.0', entró en vigor en el año 2019 y finalizó en diciembre de 2022. Este plan ha significado el rejuvenecimiento de la plantilla y el inicio de la transformación del sistema productivo para ganar más competitividad. A nivel de empleo, implicó las salidas de personal a los 61 años, y la reposición del 75 % de las plazas amortizadas en esos cuatro años, alrededor de 2.200 en toda la compañía.
