DÍA MUNDIAL DEL TURISMO
¿Cómo ha evolucionado el turismo en Cádiz?
DÍA MUNDIAL DEL turismo
En los últimos años, la provincia ha ido ganando peso hasta convertirse en uno de los principales destinos a nivel nacional
Un futuro «muy prometedor» para el turismo en Cádiz
Un turismo «sostenible» con una potenciación del ocio en Cádiz
Para conocer el peso turístico de la provincia de Cádiz, si usted es gaditano, puede hacer un sencillo experimento. Vaya a cualquier punto fuera de Andalucía y diga su procedencia. Rápidamente su interlocutor empezará a contarle las bondades de esta provincia en materia de playas, gastronomía, climatología y otros muy diversos asuntos.
Es una realidad. Cádiz se ha ido convirtiendo con el paso de las décadas en un destino de primer nivel dentro de España y cada vez es más conocido en el extranjero. Esto ha traído consigo además que el sector turístico haya ido ganando peso y sea un motor económico del que muchas familias obtienen su sustento.
Por la situación geográfica y la cantidad de kilómetros de costa es de cajón que Cádiz haya sido históricamente un lugar al que muchísimas personas del interior han ido a pasar sus vacaciones de verano. Pero la evolución del turismo ha ido incluso transformando las propias ciudades y pueblos gaditanos.
Pongamos que hablo de Conil. El municipio jandeño ha experimentado un auténtico boom turístico con el paso de los años. Al devenir diario de una localidad que miraba con interés el fruto de su actividad pesquera, se unían familias foráneas que pasaban allí algunos días en los meses de julio y agosto. Ahora, años después, es un lugar de culto para una legión de visitantes, la gran mayoría llegados desde Madrid, que copan de inicio a fin del verano los rincones conileños.
Chiclana y Sancti Petri también pueden servir de ejemplo para ilustrar el crecimiento turístico. Los famosos campitos, que se trufaban entre las viviendas de chiclaneros con gaditanos que buscaban un lugar en el que tener el terreno del que no se dispone en la capital, conviven con una importante oferta de grandes hoteles que sirven de reclamo para turistas llegados desde cualquier punto del planeta. Costa Ballena, entre Chipiona y Rota, o Sotogrande en un nivel superlativo económicamente hablando, ofrecen una enorme oferta residencial para segunda vivienda, o no, de gente que tiene a orillas del mar un sitio en el que disfrutar.
Pero claro, aunque las playas sean de una calidad excelsa de punta a punta, no solo del baño vive el turista. Y lo cierto es que la provincia de Cádiz tiene un ramillete de atractivos con los que es difícil competir y debido a ello, cada vez son más las empresas que sacan tajada.
En Cádiz, elementos con sello propio como el Carnaval ayudan a hacer un poco más llevadero, en el aspecto económico, la llegada del verano con varios fines de semana de absoluta temporada alta. Más de 3.000 de historia dan para mucho en una ciudad que tiene capacidad de atracción por sí sola durante el año entero.
El vino, el arte ecuestre o un circuito de velocidad de talla internacional erigen en la vecina Jerez otro estandarte por el que la provincia es conocida en los mercados europeos y extracomunitarios. Precisamente ahí se encuentra un aeropuerto que el sector turístico considera imprescindible para traer al suave invierno y otoño gaditano a ciudades nórdicos durante sus meses más gélidos.
Otras grandes ciudades de la Bahía como San Fernando y El Puerto ofrecen una alta calidad de vida que se refleja en su creciente número de habitantes. Tras la pandemia, hay quienes se han replanteado su modelo vital y han encontrado en estas luminosas ciudades un sitio en el que echar raíces.
Dicen que por el estómago se puede lograr una conquista y de eso esta provincia está bien servida, siendo la vis gastronómica conocida en todo el país. Además de restaurantes 'estrellados' como Aponiente en El Puerto y Alevante en Chiclana, de Ángel León, LU Cocina y Alma y Mantúa en Jerez o Código de Barras en Cádiz, hay infinidad de establecimientos que hacen las delicias de los comensales. En Sanlúcar, nombrada Capital Española de la Gastronomía en 2022 por, entre otras cosas, sus guisos marineros, los langostinos o la manzanilla, o Barbate con su famoso atún, pueden dar buena fe de las cifras que puede traer consigo el apetito.
Las Carreras de Caballos con Doñana como telón de fondo, el mirar a los ojos a África o incluso darse una vueltecita por el Reino Unido «sin salir» de la provincia, hacen de Cádiz un enclave imperdible. Y a eso se unen factores como el golf, que mueve a un importante número de extranjeros para jugar y que permite mantener abiertos algunos hoteles durante el otoño y el invierno o los cruceros, que traen a la capital miles de personas que llenan el centro de la ciudad diariamente.
En definitiva, cada vez más ojos miran a Cádiz a la hora de preparar un viaje. Ya sea en hotel, en un apartamento turístico o en una casa propia, el turismo de Cádiz ha experimentado una expansión superlativa que, pese a los 1.665.794 viajeros que el Instituto Nacional de Estadística indicaba que habían visitado la provincia este año hasta el mes de julio, aún tiene margen de crecimiento en todos los sentidos, según comentan los expertos.