«Es un premio al profesor técnico de FP frente a la Ley Celaá»
A sus 47 años, el sevillano Manuel Flores Toledano ha sido reconocido como mejor profesor de Formación Profesional de España por su proyecto educativo «@ironartarenal»
Lleva 19 años como docente y seis de profesor técnico de FP de soldadura en el IES Arenal de Dos Hermanas , donde desarrolla el proyecto «@ironartarenal» por el que se ha convertido en el mejor profesor de FP de toda España de los IV Premios Educa Abanca. Manuel Flores Toledano (Sevilla, 1973) es el claro ejemplo de que la enseñanza no tiene por qué ser aburrida.
¿Qué supone obtener este galardón de los «Goyas de la Educación»?
Mucha sorpresa y orgullo, ya que te proponen los alumnos. Es un reconocimiento personal pero también a todo el profesorado técnico o de taller de la FP frente a la nueva ley Celaá. Pese a que nos quieren meter en una bolsa de extinguidos y priorizar a los universitarios sin experiencia en el sector, los profesores de taller somos el alma de la formación profesional.
¿Cómo le han recibido en clase?
Los alumnos están locos de contentos. Ha sido tremendo, cuando este lunes llegué al taller era una fiesta. Ellos son mi mejor premio. Muchos presentaban un perfil de fracaso escolar y venían de una ESO sin terminar, pero aquí han retomado su futuro.
¿Cómo logra dar la vuelta y motivar de nuevo al alumnado?
Hay que maquinar constantemente. Cuando llegué a Dos Hermanas, pensé que tenía que crear algo. Había que hacer cosas nuevas. Yo soy el primero que me aburriría si llegara e hiciera todos los días lo mismo. Al final les viene bien a ellos y a mí también.
¿Qué es «@ironartarenal»?
Es una forma de enganchar de nuevo a estos jóvenes al sistema educativo usando una metodología que despierte su interés, que ellos puedan y no tengan miedo al fracaso. Así, el proyecto consiste en la creación de una empresa ficticia que, con la colaboración de otros alumnos del centro, se dedica a la creación, factura y venta directa de productos y esculturas de decoración en metal reciclado, usando técnicas de soldadura, mecanizado e impresión en 3D.
¿Cómo se lleva a la práctica, más aún en estos meses del Covid?
En los meses de confinamiento en casa, mal. La formación profesional es muy práctica. Pero ahora tratamos de recuperar el tiempo y estamos muy bien organizados y señalizados para cumplir las normas sanitarias sin dejar de lado los pilares del proyecto.
¿Y cuáles son?
Lo primordial es dar visibilidad al trabajo de los alumnos y que ellos aprendan a aprender. Tenemos un museo e incluso hemos expuesto en el Bellas Artes una réplica de Santa Justa y Rufina en el Año Murillo. Luego, los beneficios de fin de curso se destinan a entidades solidarias.
¿Siempre quiso ser profesor?
No, antes era trabajador de una empresa privada. Tuve dos profesores, Manuel Sánchez y Lorenzo Marban, que son mis referentes. Decidí seguir su ejemplo y hoy soy muy feliz. El buen profesor siempre se lleva trabajo a casa.De hecho, tengo un grupo de whatsapp con antiguos alumnos, donde comparto ofertas de trabajo y cursos.