Dos Hermanas
Obras, de nuevo, en la residencia de Dos Hermanas que ya fue reformada
La Junta tiene previsto adaptar ahora el complejo asistencial, modernizado hace unos años y pendiente aún de su reapertura
La residencia de mayores de Huerta Palacios de Dos Hermanas, el nuevo complejo asistencial que lleva varios años pendiente de su reapertura, tendrá que esperar aún un tiempo para su puesta en funcionamiento. La Junta de Andalucía va a realizar ahora otras reformas en el edificio , ubicado en pleno centro del municipio nazareno, para adaptar esta residencia a la normativa vigente antes de poder abrirla. El paquete de obras ya ha sido licitado por un montante de 599.795 euros, que será financiado en un 80 por ciento por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) de la Unión Europea, según se detalla en el anuncio de licitación, publicado a finales del pasado mes de noviembre.
Esta residencia se reconstruyó hace unos años sobre el antiguo geriátrico de San Fernando, que había en esta céntrica plaza nazarena, con el fin de mejorar y modernizar las instalaciones. Tras la finalización de las obras en 2011, el edificio de 5.161 metros cuadrados de superficie, fue cedido por parte del Ayuntamiento de Dos Hermanas a la Junta de Andalucía para su reapertura. Sin embargo, tras varios años de espera, el complejo continúa cerrado a cal y canto. La razón parece estar en una serie de «deficiencias» que presenta el conjunto residencial para poder cumplir con las normativas vigentes de aplicación y que ahora pretenderían «subsanarse» con estas obras, según se detalla en la memoria del Proyecto Básico y de Ejecución de Reforma de septiembre de 2016.
En este mismo documento se explica también que para la reforma de esta residencia ya se habían redactado otros documentos técnicos que «en la medida de lo posible han subsanado parcialmente esa serie de inconvenientes normativos», si bien « por una causa u otra no se han ultimado las obras de reforma dando lugar a la situación actual de desuso de la misma». Así las cosas, entre las actuaciones que habrá que realizar se encuentran algunas como el cambio de varias puertas, la modificación y ejecución de las rampas de acceso al edificio, la reforma de la instalación eléctrica en la zona administrativa, la finalización de un nuevo office en el comedor, el retranqueo de la puerta en el baño geriátrico , la reforma del aseo adaptado en la sala de visitas o, incluso, la colocación del rótulo en la fachada.
El edificio, con sótano y tres plantas, cuenta con una capacidad residencial de 134 usuarios en 74 habitaciones y dispone de servicio de comedor, enfermería, servicios de dirección y administración, salas de terapia, de estar, servicio de podología y zonas reservadas para personas psicodependientes. Hasta el complejo, además, está previsto que sean trasladados los residentes actuales del centro asistencial de mayores y grandes dependientes de Montequinto , en cuyas instalaciones se anunciaron igualmente obras de reforma aún sin ejecutar.
Larga espera
La situación en la que se encuentra esta residencia, reformada y cerrada, ha sido objeto de debate en numerosos foros a lo largo de los últimos años. Tanto partidos políticos como plataformas ciudadanas han exigido en este tiempo la apertura de la residencia a la Junta de Andalucía, que ya en 2013 licitó también el suministro de equipamientos. Ante esta situación, el Gobierno local del alcalde Francisco Toscano (PSOE) llegó a insinuar en 2015, durante un pleno municipal, que estaban barajando la posibilidad de rescindir la cesión que el Ayuntamiento otorgó a la Junta ante los «incumplimientos», aunque nunca llegó a realizarse esta idea.
Se da la circunstancia, además, de que a preguntas del Partido Popular nazareno, que ha reivindicado en numerosas ocasiones la puesta en funcionamiento de esta residencia de Huerta Palacios, el propio Toscano avanzó ya en un pleno municipal de hace unos meses que la residencia sería sometida a estas obras de reforma , que ahora están ya en proceso de adjudicación. Entre reconstrucciones y reformas, este complejo asistencial, que llevará el nombre de Dolorcita de la Huerta, lleva cerrado desde 2008.