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Cierra La Ibense, famosa empresa heladera de la provincia de Cádiz
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La compañía, originaria de Sanlúcar, ha presentado un ERE extintivo
La Ibense, conocida compañía de helados con implantación en la provincia de Cádiz y otros puntos de España, está viviendo un proceso de liquidación empresarial después de anunciar el consejo de administración la inminente presentación de un ERE extintivo.
Sainberg La Ibense, nombre actual de la empresa, es heredera de La Ibense Bornay, fundada en Sanlúcar en 1892 y considerada la heladería más antigua de España. De hecho, para poner en valor ese dato, el nombre comercial de la compañía pasó hace tres años a llamarse La Ibense 1892.
La mítica firma heladera anunció en 2006 el traslado de Sanlúcar a Jerez del centro de producción que abastecía a todas las heladerías, instalándose en el Parque Tecnológico jerezano, donde ha operado hasta la actualidad. Algunos de los empleados afectados, que trabajaban desde la etapa sanluqueña, argumentan que el cambio de localización implicó también una permuta en el modelo de gestión que a medio plazo ha terminado con el cierre de la empresa.
En 2015, La Ibense fue adquirida por la empresa Sainberg, que inició un plan de expansión comercial que le permitió introducir sus reputados productos en grandes centros comerciales e incluso abrir su primer establecimiento en Madrid.
Sin embargo, con esta compañía al frente, los trabajadores empezaron a sufrir episodios de impago. Una situación financiera que empeoró debido a la pandemia, aunque los empleados pudieron cobrar durante la etapa de confinamiento debido a los ERTE. Ese mismo mecanismo ha sido utilizado desde julio, mes en el que precisamente la empresa entró en concurso de acreedores.
Ahora, la dirección empresarial ha anunciado a los 40 trabajadores fijos y otros tantos fijos discontinuos la presentación de un ERE extintivo con el que La Ibense cerrará su actividad.
Hay que precisar que algunas de las cafeterías que operaban bajo la marca de La Ibense se desligaron de la empresa cuando cambiaron de propiedad y aunque conservaban el nombre, son de titularidad de la familia Bornay, fundadora de la compañía heladera por lo que nos les afecta esta situación.
Desde UGT lamentan la situación después de que los trabajadores del centro de producción hayan redoblado sus esfuerzos por intentar evitar esta situación pese a no cobrar y ahora solicitan que se abonen las liquidaciones establecidas y que se negocie con las empresas interesadas en la adquisición de la nave para favorecer el empleo.
«Una nueva desgracia para nuestra provincia, de nuevo una mala gestión empresarial se lleva por delante una empresa emblemática y casi un centenar de familias que durante algunas épocas se han llevado varios meses sin cobrar por mantener su empresa», expone UGT en el comunicado. «No más pérdidas de empleo en nuestra provincia», rematan.
