Los otros chinos del Trocadero

La presencia de empresarios asiáticos en el suelo industrial de Puerto Real no es nueva. La Bahía de Cádiz ya ha tenido experiencia a la hora de negociar con grupos chinos su implantación en el Bajo de la Cabezuela y en el Trocadero. A la inauguración este martes de la planta de Zhenshi para la fabricación de fibra de vidrio se han sucedió otras que no tuvieron tanto éxito. Este fue el caso de BWI (Beijing West Industries Co. Ltd) en 2012 que planteó a la Junta de Andalucía ocupar los terrenos de la antigua Delphi para montar en ellos una nueva factoría de automoción.

Las negociaciones fueron largas y complicadas, pero la cuerda se rompió cuando el grupo asiático trató de implantar un convenio laboral distinto al del Metal que impera en la provincia de Cádiz. En octubre de ese año, la dirección de la compañía anunció su retirada argumentando que los costes de mano de obra planteados en las negociaciones para ubicarse en Puerto Real eran inviables.

El interés mostrado por la Junta, entonces en manos del PSOE, por cristalizar la inversión fue notable. Entre las partes hubo 50 contactos entre reuniones, cartas o contactos telefónicos con BWI. El primero se produjo en febrero de 2012.

El convenio colectivo que marcará el futuro de los trabajadores de Zhenshi es, de momento, una incógnita. Por ahora, los agentes sociales de Cádiz no cuentan con información al respecto y no saben aún si la actividad del grupo asiático se enmarca dentro del Metal o de la Química, «en cualquier caso el convenio tiene que ser acorde con la normativa laboral española». Fuentes de CC OO han destacado que en ningún momento y ante el volumen de empleados que baraja esta empresa se permitirá un convenio por debajo de los sectoriales que están vigentes en Cádiz.

Este martes, el presidente de Zhenshi Holding Group, Yu Qiang Zhang, la vicepresidenta del grupo, Anna Huang, y el director general de la división de Zhenshi en España, Poul Fuglsbjerg, asistían a la inauguración de su planta gaditana donde fabricarán fibra de vidrio en bobinas para recubrir estructuras eólicas. Se trata de una inversión de 45 millones de euros y la posibilidad de generar unos 400 empleos, una vez, que la planta se encuentre a pleno rendimiento a partir de 2026.

En esta ocasión ha sido la dirección de Airbus España la que ha encontrado comprador para sus instalaciones de Puerto Real y asegurar con ello un futuro industrial para las mismas. No hay que olvidar que Airbus ha fusionado su actividad en Cádiz concentrando toda la carga de trabajo en su planta de El Puerto de Santa María. De hecho, esta factoría aborda ahora un proceso de ampliación para poder albergar las líneas de producción que se encuentran en la planta de Puerto Real. El grupo aeronáutico abandonará de manera escalonada la planta puertorrealeña y culminará la mudanza a la de El Puerto en el primer trimestre de 2026.

Airbus ha sido quien ha encontrado al nuevo inquilino de las instalaciones y quien ha servido en bandeja una nueva actividad industrial a gran escala en la Bahía como es la fabricación de fibra de vidrio en grandes bobinas. Las dimensiones de la planta de Airbus, totalmente diáfanas, es lo que llamó la atención del grupo chino para su inversión y la situación geográfica de Cádiz como futura plataforma logística. El propio presidente de Zhenshi destacó en su discurso que la presencia del grupo en Puerto Real forma parte de un plan estratégico de la compañía.