chiclana

Marisol Saldaña, la 'sonrisa' al final del túnel: una pérdida repentina de visión y un «salvavidas» llamado la ONCE

Después de sufrir una maculopatía a causa de una infección durante el embarazo y someterse a tres intervenciones, perdió la visión completa de su ojo derecho

La cuponera de la ONCE ha sido galardonada como Vendedora del Año 2024 de Cádiz

Marisol Saldaña, en su puesto de la ONCE pepe ortega
Pepe Ortega

Pepe Ortega

Chiclana

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Las puertas automáticas delatan el trasiego de personas en el supermercado. Sin embargo, no todas entran con la intención de llenar la nevera. «Dame un rasca, por favor», pide una señora. Marisol Saldaña (Cádiz, 1989) la recibe con su nombre y le entrega el boleto. Ella es el motivo por el que muchos chiclaneros prueban suerte y, a su vez, ayudan a las personas con discapacidad a «tener una oportunidad». La trabajadora de la ONCE ha sido galardonada con el premio a Mejor Vendedora de la Zona 2024 por su «esfuerzo diario», su «compromiso con los valores de la ONCE» y su sonrisa, que no se borra de su cara en ningún momento a pesar de que hayan venido mal dadas. «¡Cómo no va a ser la mejor vendedora si venimos buscándola todas!», exclama una cliente.

«Según mi jefa, no solo me han dado el premio por las ventas, sino por la actitud. Dice que yo soy muy positiva, que siempre estoy sonriendo y no tengo quejas de nadie. Para mí es un orgullo haber recibido este reconocimiento», expresa con emoción mientras le comprueba a los clientes si sus cupones tienen premio. La actitud en su puesto de trabajo es fundamental. Tanto es así que la relación de Marisol Saldaña con sus clientes se ha transformado en muchos casos en amistad. Alrededor de su puesto, personas mayores conversan y le hacen compañía durante horas. «Mucha gente me compra un cupón y se queda una hora conmigo solo para contarme sus cosas y nos hacemos compañía». 

Al despertarse, todo cambió

Antes de repartir suerte en forma de boleto, la vida de Marisol Saldaña era completamente diferente. Todo cambió cuando un sábado cualquiera se despertó y no veía bien con su ojo derecho. «Yo me acosté viendo perfectamente y cuando me desperté tenía como cuatro o cinco mosquitas dando vueltas dentro del ojo». Rápidamente, se montó en el coche y fue al hospital, pero al ser fin de semana no había ningún oftalmólogo que pudiera atenderle. Fue el lunes cuando le hicieron las pruebas pertinentes y le anunciaron dos diagnósticos: estaba embarazada de 8 semanas y padecía maculopatía. La enfermedad, causa de una infección en el embarazo, le provocó la pérdida, primero, del 70% de la capacidad visual.

 En el horizonte, se planteaban dos escenarios: se operaba bajo el riesgo de que pudiera afectar al desarrollo del feto o no lo hacía y se arriesgaba a que cuando se operase, fuera tarde. «Ni me lo pensé. Sabía que si me operaba, a lo mejor a Valentina le podía pasar algo. Volvería a tomar la misma decisión otra vez, lo tengo claro«, expresa con una sonrisa de oreja a oreja cuando menciona a su hija. Una vez nace, hace siete años, pasa tres veces por quirófano. »La primera vez que me pinchan en el ojo recupero un 10% de visión; al mes y medio, me vuelvo a operar y me quedo tal cual; y es en el tercer pinchazo cuando me quedé totalmente ciega del ojo derecho«, relata la vendedora de la ONCE, quien lamenta que ya no puede tener más hijos por el riesgo existente a quedarse ciega del otro ojo.

A partir de aquel día, todo se torció. Marisol Saldaña, graduada en Relaciones Laborales y Recursos Humanos, trabajaba en una agencia de viajes cuando la maculopatía se lo llevó todo por delante. «Yo siempre estaba fuera. Mi trabajo era muy independiente. Entonces, me vi sin poder trabajar, conducir y sola y caí en una depresión de caballo«, lamenta. El proceso de adaptación al pasar de ver perfectamente a hacerlo tan solo por un ojo fue francamente «difícil». «Me llevó dos años adaptarme porque yo, por ejemplo, me servía una Coca-Cola y la derramaba fuera del vaso o salía a la calle y me tropezaba con todo el mundo. Fue muy duro».

La ONCE le brindó la oportunidad de trabajar

Actualmente, tan solo puede andar porque cualquier mínimo esfuerzo puede provocar su ceguera total. En esos duros momentos, siempre tuvo a su lado a su familia, que, ante la negativa constante que recibía por parte de las empresas para trabajar, le animaba a probar suerte en la ONCE.

«A mí me reconocieron un 79% de discapacidad y cuando tú pones en el currículum que tienes ese grado, no te llama nadie. Para aquellas personas que tengan más del 55% de discapacidad no nos dan la opción ni de hacer la entrevista», denuncia Marisol, quien insiste en que las empresas deben «dar mejores oportunidades». Esas que sí le dieron en la ONCE. Allí, le «abrieron las puertas» de par en par nada más llegar, con tan mala suerte que, una vez realizado el curso y estar lista para empezar a trabajar, se declaró el estado de alarma debido a la pandemia de la Covid-19. En julio, comenzó a repartir suerte por la orilla de la playa de La Barrosa y, gracias a la ONCE, el sentirse «inútil» a causa de su problema de visión empezó a cambiar. «El trabajar aquí me ha devuelto la sensación de sentirme una persona válida».

La ONCE le cambió la vida como ella se la ha cambiado a muchísimas personas. Durante los cinco años que lleva como vendedora, ha repartido cinco grandes premios: en total, 2.160.000 euros. Sin embargo, aunque la mayoría de las veces no toque, aquellas personas que se acercan a su puesto se marchan con la sensación de haber ganado. Tal vez porque sienten que la verdadera suerte no está en el boleto, sino en compartir ese rato agradable por las mañanas con una persona que siempre tiene una actitud positiva ante la vida que se contagia. Marisol imprime su sonrisa en cada boleto y quien lo compra la hace suya. Ella desconoce si antes de que pasara todo era más risueña, pero sabe perfectamente que ahora es feliz. Y eso es gracias a su «familia» del Cash Fresh, los amigos que también son clientes y la ONCE, su «salvavidas».

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación