La tecno rumba llegó a Sancti Petri este viernes gracias a Camela. El público, mayoritariamente femenino, disfrutó de las canciones de su disco nuevo Que la música te acompañe y de los grandes éxitos del grupo que lleva ya 29 años encima de los escenarios.
Los cuñados Dioni y Ángeles derrocharon simpatía y naturalidad para meterse al público en el bolsillo y dejar un gran sabor de boca entre los asistentes al concierto.
Arrancaron con Puedes besarme, tema que pertenece a su último trabajo discográfico. Pero fue con Sueños inalcanzables cuando el público entró realmente en calor y se entregó al dúo que se divirtió en el escenario. Después de El calor de mi cuerpo, Nunca debí enamorarme y Háblale de mí, hubo una interrupción en la música para que Dioni contara que Camela el año pasado hizo 87 conciertos. El de Sancti Petri hacía el número 43 de los 92 que el grupo tiene firmados para este 2023. Cifras mareantes que fueron la introducción perfecta para el tema Gracias (a tus pies), incluido en su último trabajo y que pretende ser un homenaje al público.
Luego fue Ángeles quien tomó el micro para contar los inicios de Camela y cómo jamás imaginaron que los tres años del primer contrato que firmaron con la discográfica se iban a convertir en 29. Tras este momento, comenzó un remix en el que interpretaron algunas de sus canciones más antiguas. Temas como Guarda tus palabras,Bella Lucía, Palabras de papel o Estrellas de mil colores tuvieron cabida en este bloque.
Retomaron con No me hables para dar paso a una preciosa versión de Cuando zarpa el amor cantada por Ángeles en solitario para disfrute de los presentes. El concierto entraba así en su recta final. No faltó En el bolsillo de mi corazón, primer single de su último disco. Ángeles tomó la palabra para decir que, a falta de premios, Camelas «siempre ha tenido el único premio que siempre ha sido 100% auténtico y real y eso es el cariño del público». Además, introdujo la despedida con otro de sus grandes clásicos, Lágrimas de amor que la audiencia bailó y coreó de principio a fin.
Un final por todo lo alto que remataron en los bises con la interpretación de Camela y, nuevamente, Cuando zarpa el amor, aunque esta vez en su versión más conocida que fue el cierre perfecto para una nueva noche de disfrute en Sancti Petri.
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