Carta abierta al Proyecto Lógica

E l pasado 21 de septiembre se cumplían «cinco» años desde que los Gobiernos Central y Autonómico suscribiesen un histórico acuerdo para la creación del Proyecto Lógica como sustituto del de las Aletas que, a excepción de unas 120 hectáreas de su reserva demanial en el Zerpla 3 de la Bahía de Cádiz, el resto había sido tumbada por la sentencia 563 de 31 de marzo de 2017, de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo de Justicia, anulándose todos los usos proyectados excepto los de la delimitación marítimo terrestre incluida en el recinto.

Lógica surgía pues con fuerza con misión de cubrir el vacío dejado en los requerimientos comarcales logísticos, tecnológicos, industriales y, sobre todo, de empleo, en los casi tres lustros que duró el frustrado proyecto Aletas, ya difunto, que llegó en su día a ilusionar a gran parte de la sociedad civil local y comarcal. Hoy, padre e hijo, están muy cerca de cumplir «veinte años» sin que podamos entonar el célebre «cumpleaños feliz», pero con la esperanza de que esté cercano el arranque de la ejecución de Lógica y que, por tanto, podamos pronto escuchar de sus responsables sus líneas de acción y contenidos, respondiendo a las diversas invitaciones hechas para ello desde la Sociedad Puertorrealeña de Amigos del País, que represento.

Aquel añorado 21 de septiembre se anunció en los medios de comunicación que la nueva plataforma de desarrollo industrial que aglutina al Puerto de Cádiz y Zona Franca presentarían de inmediato una oferta de compra por los terrenos de Delphi donde se proyectaba instalar un centro de referencia de la Agencia de Energía. De esta forma las algo más de 43 hectáreas del Polígono Industrial El Trocadero se sumaban a las 120 residuales de las Aletas constituyendo la casi totalidad de suelos para el desarrollo de Lígica.

La aportación, hasta el momento, de estos proyectos al municipio afectado, Puerto Real, ha sido un bloqueo importante de gran parte de su suelo disponible, industrial y terciario, mermando sus posibilidades de competir, por ejemplo, con su municipio vecino, El Puerto de Santa María, donde en los últimos veinte años se ha desarrollado un magnífico polígono industrial, terciario y, por qué no, logístico, en unos suelos de características medioambientales muy parecidas a los de las Aletas, a juzgar por su nombre: Las Salinas. En cuanto al escenario geográfico del Estrecho durante este mismo tiempo ha entrado en valor logístico el Puerto de Tánger.

El miembro de la plataforma de desarrollo industrial de Lógica, Puerto de Cádiz, individualmente (BOE-B-2020-471), ha tomado iniciativa con la ampliación de sus delimitaciones en los suelos (433.213,9 m2) de El Trocadero, llamados entonces a unirse al Proyecto Lógica, pero no en la dirección señalada hace cinco años. Estos suelos, que cambiarían su actual calificación industrial y terciaria por la de uso portuario, previsiblemente, sería destinados a la expansión del almacenaje y manipulación de gráneles con la tecnología actualmente en uso.

Según datos de 2021 de la Asociación de Cargadores de España, con esta incorporación el Puerto de la Bahía de Cádiz se situaría en la quinta posición de superficie entre los diez de mayor tránsito de mercancía y, si incorpora el resto de suelos de Lógica, se situaría a nivel de la tercera posición. No creemos que haya en la Bahía de Cádiz ningún ciudadano que tras este esfuerzo acumulativo de espacios no le desee al Puerto de la Bahía de Cádiz que alcance la correspondiente posición entre los diez puertos con más tránsito de mercancías de España.

Para Lógica, en su quinto cumpleaños, sirva nuestro ánimo para que pronto veamos su arranque con fuerza inversora y socioeconómica pidiéndole que a la hora de ejecutar su desarrollo, tenga en consideración los años de bloqueo que el binomio ALETAS-LOGICA ha producido al desarrollo de la Villa de Puerto Real y la compensen convenientemente.