Cádiz
Vídeo: Un grupo de orcas ataca a un velero en el Estrecho: «Son cuatro gigantes, estamos acojonados»
Los mamíferos se han convertido en una pesadilla para estas embarcaciones y ahora amplían su radio de acción llegando hasta Ceuta
Un grupo de varias orcas gigantes ha atacado en las últimas horas a un velero en el Estrecho de Gibraltar. La embarcación, de nombre Kelba y atracado en el puerto de Ceuta, era golpeada por los mamíferos en la zona de Benítez.
La interacción provocaba la rotura del timón y la orza y, por tanto, la intervención de Salvamento Marítimo y la Guardia Civil, que tuvieron que rescatar a los tres tripulantes del barco. Tal y como apunta El Faro de Ceuta, que ha tenido acceso a las imágenes, las tres personas llamaron al 112 pidiendo auxilio al quedar el barco a la deriva y seguir las orcas golpeando el casco. «Son cuatro orcas gigantes. Estamos acojonados», se les escucha decir en el vídeo, mientras son calmados por sus 'salvadores' ya que en ningún ataque se han producido daños personales.
Estos 'ataques', o interacciones como le gusta denominarlas a los expertos, son habituales en el litoral gaditano durante la temporada de marzo a octubre. Desde aproximadamente Barbate hasta el Estrecho. No obstante, no se han registrado choques de esta virulencia en la zona de Ceuta.
La embarcación tuvo que ser remolcada por la Salvamar Atria hasta el puerto de Ceuta.
¿Qué hacer ante el ataque de las orcas?
El Ministerio de Transición Ecológica detalla algunos consejos en caso de tener un encuentro con las orcas.
«En caso de interacción, tanto si se trata de una embarcación a motor como de una embarcación a vela, no detener la embarcación y navegar hacia la costa, a aguas menos profundas. No navegar en la zona delimitada del Golfo de Cádiz y el Estrecho de Gibraltar indicada durante los meses de abril a agosto, y navegar lo más próximo posible a la costa dentro de los límites de seguridad. Evitar que las personas a bordo se acerquen a las bandas, procurando que se sitúen en lugares que proporcionen la mayor protección posible ante eventuales movimientos bruscos que pudieran ocasionar lesiones o la caída al mar, y frente a golpes provocados por el repentino desplazamiento de elementos móviles. Evitar la realización de conductas y el empleo de medidas disuasorias que puedan causar muerte, daño, molestia o inquietud a los cetáceos«.
Pero si al final se produce la interacción, «deje el timón libre y no toque la rueda, ya que al golpear el timón bajo el agua, la rueda del timón puede girar repentinamente sin control, y se ha demostrado que los animales tienden a golpear el timón con más fuerza, ya que sienten más presión sobre él y el daño a los barcos tienden a ser más grandes«.
«Las orcas pueden ser estimuladas por acciones humanas para interactuar con el bote, así que por favor trate de mantenerse fuera de su vista y no grite, trate de golpearlas, tocarlas o arrojarles cosas».
¿Por qué se producen las interacciones?
Es el gran misterio. Todavía no hay una respuesta tajante, y sí muchas hipótesis lanzadas por diferentes especialistas. Varios consideran que se trata de una práctica de entrenamiento, que las madres enseñan a las crías como cazar ante el elevado número de atunes y que el movimiento de la embarcación se asemeja a un túnido y el timón a su aleta.
Por otro lado, hablan de 'aburrimiento', si este término puede existir entre la fauna. Según una investigación de la Comisión Ballenera Internacional (CBI), lo que inicialmente se pensó que era una acción coordinada y hostil contra barcos y yates, en realidad es solo una forma de entretenimiento para grupos de orcas adolescentes aburridas.
En su momento tomó mucho cuerpo la increíble historia de las 'gladis'. Una de las principales hipótesis de los investigadores era que la matriarca del grupo, 'White Gladis', quedó traumatizada tras un incidente con un bote y ahora ataca a las embarcaciones junto a otros ejemplares que imitan sus movimientos.